No Quiero Perderte

Esos Hermosos Ojos Verdes

— OH DIOS MIO....— es lo único que pude decir al ver el vaso de café chorreado en la camisa del chico frente a mi —¡OH DIOS MIO! Lo siento muchísimo — expresé con mis manos casi tocándolo.

—No te preocupes, solo es una mancha — dijo el chico y me sonrió—  estoy seguro que se quitará.

—De verdad lo siento, estaba distraída, le llevaba el vaso a mi amiga y terminé empapándote —  sonaba muy nerviosa —yo ni siquiera tomo café, odio el café — no podía parar de hablar, ¡ya cállate, Emma! —no se por qué les gusta a las personas si es tan amargo, quiero decir...Auch!— un pequeño dolor que fue creciendoen mi brazo me hizo parar de hablar. Sabía lo que significaba—Jessica! ¿por qué?

—Haces mucho drama, amiga. Ah, y por mi café.

Si, ella es mi mejor amiga, Jessica; blanca, de cabello oscuro y ojos cafés que apareció de la nada a penas derramé su café. La conozco desde los 6 o 7 años, somos vecinas de apartamentos...predije su locura desde que la vi, pero bueno, es ella la que siempre me salva de las idioteces que estoy por hacer o decir aunque su modo de hacerlo sea pellizcándome!

—Lo siento— dije fijándome en el chico castaño frente a mi. Me miraba con confusión. De seguro piensa que estoy loca— yo pagaré por eso —señalé la camisa.

—No, esta bien. Fue un accidente, entiendo, pero deberías tener más cuidado. Creo que llamaré a mi novio para cancelar. 

Espera...Novio?. No puede ser, el chico castaño de ojos celestes, labios perfectos,y músculos definidos es...¡gay!

¿Por qué los hombres tienen cada vez más suerte de encontrar lo perfecto, y nosotras?

Entre mi Jessica y yo soltamos un ¡¿Qué?!

—Si, soy gay. Pensaron que era...

—¡si!— dijimos al mismo tiempo.

—Pues, lo siento por no ser lo que esperaban —dijo en tono sarcástico —Debo irme, esto es pegajoso y al parecer atrae muchas moscas — dijo señalándonos.

Que mala onda, pensé que él era el indicado. Bueno, al menos no tuve que pagar por la lavandería. La verdad no traía más dinero en mi bolso.

—¡Que grosero!— dijo Jessica mientras nos dirigíamos a nuestra mesa —No puedo creer que exista gente así de malhumorada. 

—¿En serio, Jessica? tu tampoco eres tan amable que digamos— me fulminó con la mirada.

—Está bien... Des quítate conmigo si quieres. Lamento mucho tu decepción— dijo soltando una pequeña risa burlona mientras le daba una mordida a su muffin ya que era lo único que tenía gracias a mi.

—¿Decepción?¿De qué? ¿Del tipo ese grosero? Ja!!

—Si, si, búrlate todo lo que quieras...pero tú y yo sabemos que ese chico te dejó babeando apenas lo viste, ANTES...— hizo énfasis en esa palabra casi gritando —...de que le tiraras el café APROPÓSITO!

¿Quéeeee? yo jamás....bueno si es verdad, fue apropósito, pero ya estoy cansada de ser la violinista cuando estoy con mi mejor amiga y su novio. Necesito a alguien para mi!!!

—Biennn... A ti no te puedo engañar! pero no es justo que cuando estás con Daniel, te olvidas de que existo!

Daniel, es uno de los chicos mas populares de la escuela, a demás de ser el novio de mi mejor amiga. No soporto lo hipócrita que llega a ser, sobre todo cuando coquetea con pe@#as delante de mi sabiendo que soy su mejor amiga. Llevo semanas tratando de decirle a Jess que termine con él pero es muy difícil cuando sabes que tu amiga esta perdidamente enamorada. ¡Idiota!