Capítulo 6:
He pasado la peor noche de mi vida.
No he podido dormir por los nervios y me he pasado toda la noche vomitando el pollo que nos había servido mi madre para cenar.
Ya cuento 2 días desde que Jessica… se fue. Se fue para no volver.
Durante estos dos días mi madre se ha pensado mucho lo de si llevarme a un manicomio, una cárcel o no hacer nada conmigo. Durante estos dos días, he estado encerada en mi habitación. Mi madre no me dejaba salir por miedo.
Pero ayer por la noche, mientras mi madre, mi padre, Luke, Krista y yo estábamos sentados alrededor de la mesa cenando mi madre dijo:
-Hoy ha llamado el detective. Me ha preguntado si ya teníamos pensado lo que íbamos a hacer con Ambber.
-¿Y…?- inquirió Krista.
-Y, le he dicho que Ambber iría un tiempo al manicomio, si a ella le parecería bien.
-¡Mamá!- dijo Krista indignada- ¿Cómo puedes hacerle esa pregunta? ¡Ella te dirá que es inocente como todos los asesinos asquerosos y sucios!- dijo mirándome con cara de asco.
-Krista, por favor, contrólate- dijo mi padre metiéndose un trozo de pollo en la boca-. Estamos cenando.
-¿Y que me importa a mí la cena? A caso ¿Jessica volverá a cenar en esta mesa con nosotros en navidad? A caso ¿Eric volverá a cortar el pavo el día de acción de gracias junto a todos nosotros?
-No hables de Eric…- dije en voz baja y con mucha rabia. Estaba tan llena de rabia que apretaba el tenedor con tanta fuerza que se me clavaba en la mano.
-¿Y ahora resulta que tampoco puedo hablar de mi propio hermano?- dijo Krista con sarcasmo- Hermano al que TÚ mataste.
-¿CÓMO ME PUEDES DECIR ESO? ¡YO QUERIA A ERIC MÁS DE LO QUE TU HABIAS QUERIDO A NADIE EN TU ESTUPIDA VIDA DE PROSTITUCIÓN SIN FRENO! ¡ERES UNA GUARRA Y UNA MALA HERMANA Y ESO NO LO VA A REMEDIAR NADIE NI LO VAS A PODER QUITAR DE ENCIMA!- Bajé el tono de mi voz- ¿Sabes por qué? Porque eres una prostituta.
-¡Ya basta!- gritó mi madre- ¡Parad! Chicas, somos una familia. Las familias no se dicen esas cosas. ¿Qué pensará vuestro hermano de todo lo que os estáis gritando?- dijo mi madre señalando a Luke.
-Pues- dijo Krista-, Luke estará asqueado de tener a esta asesina e idiota de hermana. ¿Por qué no reconoces de una vez que fuiste tú la que mató a Eric y a Jessica? ¿De verdad te jodía tanto que toda la familia te pusiera a ti en último lugar? ¿De verdad pensabas que al matar a Eric, la única persona de esta familia que te quería, todos iríamos detrás de ti como la pequeña y pobrecita Ambber? ¿De verdad creías que matando a Jessica serias la única chica de esta familia con buenas notas y que todos pensaríamos que eras la mejor?
-Krista, ya basta- dijo mi madre sin levantar la vista del plato.
-Me das asco- dijo Krista escupiendo cada palabra de su boca como si fuera veneno-. Asco.
-¡Krista! ¡Ya basta!- gritó mi madre dando un fuerte golpe en la mesa-. ¿Es que no podemos cenar en paz como una familia de verdad? ¿No podemos dejar de insultarnos y de culparnos?
Todos bajamos nuestra mirada al plato de pollo que teníamos delante. Solo se oían los sonidos de los tenedores rozándose con el plato y el sonido de las bocas al masticar.
-Sí- dije.
Todos levantaron la vista para mirarme.
Lágrimas de rabia, frustración y miedo me quemaban en los ojos. Pero levanté la vista del plato y con una amplia sonrisa dije una palabra, una mísera palabra que me odiase a mí misma para toda la vida:
