Eres todo lo que necesito. (TERMINADA)

Capítulo LI.

-Se trata de lo que alguna vez tuvimos. -Me miró con tristeza.

-¿Te refieres a nosotros? -Pregunté sin dejar de mirarla.

-Sí. -Agachó la cabeza. -Sé que tú ya no me amas. -Movió un par de veces la cabeza para después alzar la mirada. -Ahora amas a Mariska.

-¿Cómo lo sabes? -Pregunté realmente muy sorprendido.

-¡Ay Christopher! No nací ayer. -Dijo con un poco de risa.

-¿Estás enfadada? -Comente sentándome.

-No, para nada. -Dijo haciendo lo mismo que hice hace unos segundos. -Simplemente se notaba bastante que ella te gustaba.

- No sólo me gusta, me encanta, la amo como no tienes idea. -Le conteste emocionado.

-Jajaja. -Rió. -Pareces un adolescente contándole a su mamá sobre su nueva chica.

-Es que esa mujer es perfecta. -Respondí pensando en Mariska.

-No tienes que decírmelo. -Empezó a soltar pequeñas risas.

-Lucía. -Sujeté una de sus manos. -Perdón si te incómoda todo lo que te estoy diciendo, no es mi intención.

-Tranquilo. -Respondió poniendo la mano que tenía libre en mi hombro. -Somos amigos, ¿no?

-Por supuesto. -Contesté y le di un abrazo cálido de buenos amigos. -Gracias por entender.

-No hay de que Chris. -Se levantó del asiento. -Y aunque tú y yo ya no estemos juntos, siempre estaré para apoyarte.

-Gracias Lu. -La abrace nuevamente. -Bueno, me voy y gracias por la platica.

-Vete ya. -Rió y me empujó.

-No me quieras tanto. -Le respondí riéndome a carcajadas y salí del edificio.

Continuará...