La Profesora De Música

Capitulo 44

ANNIE' POV:

-¿Cómo están? –Les pregunte a Camila y Lauren sentándome frente a ellas

-Muy bien, ¿Qué haces aquí? –Pregunto Lauren, siempre iba al grano

-Kendall me invito y bueno, no tenia nada que hacer

-Como sea, ella se lo esta pasando muy bien –Camila señalo a Cara quien bailaba desenfrenadamente sensual frente a mis ojos

El alcohol ya comenzaba a hacer efecto y hablaba cosas sin sentido, mi cuerpo se movía al ritmo de la música junto a el de Dakota . Me senté lejos de la gente en el sector vip y solo me dedique a ver como Cara bailaba toda sudada contra el cuerpo de Kendall, una imagen que me hacia subir a mil, sentí sus ojos clavándose en mi, ella no me había quitado de su vista en toda la noche .

30 minutos después Cara dejo el sector vip y salió sola con una botella de champagne, no dude en seguirla, se dirigía a el jardín donde había mas gente de cuando llegue, ella camino hacia donde no había mucha gente y se sentó en una hamaca , yo solo me limite a quedarme parada a unos centímetros de ella.

CARA POV:

La vista que tenia la hamaca era una de mis preferidas en los días que pasaba aquí, el lago que estaba frente a ella era lo mejor. Había tomado una botella de champagne para beberla sola en la soledad, pero apenas Salí camino aquí sentí la presencia de Annie a mis espaldas.

-¿Sabes como me sentí los siguientes años luego de nuestra separación? Muy mal, me sentía en un laberinto –Le hable a Annie con la mirada perdida en el lago. Espere unos segundos y no hubo respuesta –Annie , no muerdo, puedes acercarte –Hable dándome vuelta para así poder mirarla

-Lo siento, pensé que querías estar sola –Hablo mientras buscaba algo en su abrigo –Ten, Feliz cumpleaños –Me tendió una pequeña caja –Solo no lo abras ahora –Agrego cuando yo ya me estaba preparando para quitarle todo el papel que lo envolvía

-Muchas gracias –Sonreí y le di un sorbo a la botella de alcohol

ANNIE POV:

-Entonces ¿Qué es un laberinto en tu vida? –Pregunte sentándose a su lado

Este era el mejor momento para decir que era hermosa, en la oscuridad, junto a mi, olía a sudor, a luz del sol y a vainilla. En esa noche de luna menguante podía ver poco mas que su silueta excepto cuando fumaba, cuando la cereza ardiente del cigarro encendido hace unos instantes empapaba su rostro de una suave luz roja. Pero, incluso en la oscuridad, podía ver sus ojos como esmeraldas impetuosas. Tenia el tipo de ojos que te predisponen a apoyarla en cualquier empeño. Y no solo era hermosa sino sexy, también, con los pechos pegados a la apretada musculosa, las piernas curveadas que se mecían bajo la hamaca, las botas que colgaban. Fue justo entonces, entre el momento cuando le pregunte sobre su laberinto y cuando me contesto, que me di cuenta de la importancia de las curvas, de los mil lugares en donde los cuerpos de las chicas pasan de un lugar a otro: del arco del pie al tobillo y a la pantorrilla, de la pantorrilla a la cadera y a la cintura, al pecho, al cuello, a la nariz de ladera de esquí, al frente, al hombro, al arco cóncavo de la espalda, al trasero, al etcétera. Había observado las curvas antes, claro esta, pero nunca había captado todo su significado.

Con la boca lo suficientemente cerca de mi para sentir su aliento a alcohol, dijo:

-Ese es mi misterio, ¿no? ¿Mi laberinto fue vivir muerta o morir de apoco? Pero ¿de cual trataba siempre de escapar? ¿del mundo o del final del mundo?

Después de un rato me di cuenta que de verdad ella esperaba una respuesta pero el impulso fue mas grande. Incapaz de decir cualquier cosa quite la botella de sus manos, dejándola sobre una mesa de centro que había cerca, antes de tomarla por la nuca y unir sus labios a los míos. La obligue a abrirlos dejándome sentir el calor y la humedad de su lengua junto a la mía. Nos besamos hasta que nos falto el aire. Hasta que no quedara nada mas que un amor puro y fuerte envolviéndonos bajo la noche estrellada.

CARA POV:

Delinee su cintura con una mano mientras con la otra acariciaba su cuello. Su lengua se chocaba contra la mía, a veces como un juego inocente, otras veces con movimientos exactos para dejarme mas loca de lo que estaba. Era inevitable sentir los cambios en mi cuerpo conforme el beso se volvía mas intenso, estuve mas tiempo del que podía soportar lejos de su piel, ahora cada pequeña parte de mi implora por ella, por un mayor contacto. Sus labios ahora estaban tan gruesos, tan apetitosos, vaya ya no puedo dejar de besarla.

Por un instante recordé cuando Annie era solamente mía, de cuerpo , alma y corazón. Un error, un distanciamiento innecesario y yo perdí a la única persona que realmente valía la pena.

---