1

1.7K 151 30
                                    

13:42pm

Se supone que debían haber salido hace una hora en camino al hotel, pero Queen no había abierto los ojos desde que se quedó dormida en plena calle el día de ayer después de la fiesta. Así que Shawn tuvo que ponerla en el auto y hablar con sus padres para darle toda la información sobre el hotel y los horarios para que no se preocuparan. Se despidieron del muchacho y le dieron un dulce beso en la frente a su hija, para que ambos jóvenes de dirigieran a la ciudad.

A mitad de camino, Queen despertó con un gran y horrible olor de cabeza y fue obligada a oler unos cuantos plátanos para que se le pasará la resaca. Hace mucho tiempo había leído en internet que esa fruta podría ayudar en esos casos, y gracias a Dios que sí pudo, en menos de una hora ya estaba como nueva, aunque seguía cansada.

Hicieron una parada pequeña en McDonald's para pedir algo para llevar. Lo único que Queen ordenó fueron papas fritas grandes y un helado ya que no tenía tanta hambre, mientras que Shawn eligió una hamburguesa.

La rubia de aburría muy rápido, así que Shawn le prestó su teléfono cuando la batería del móvil de la chica de había acabado, e hizo lo mismo con el del chico. Así que encendió la radio:

-No-negó cambiando de estación-. Ugh, no estamos en los 70's-eligió otra-. Me gusta pero no es el momento-Shawn presionó sus dedos con fuerza en el volante. Ya no faltaba mucho-. ¡Oh por Dios! ¡You think I'm pretty, without any make up on, you think I'm funny...!

No es que a Shawn no le agradeKaty Perry, es más, le encantaba escuchar su música en ciertas situaciones, pero no cuando su novia cantaba a todo volumen como un "angelito". Los minutos se hacían eternos mientras sus oídos procesaban los melodiosos sonidos de Queen, hasta que por fin tuvo el coraje de apagar la radio, con la consecuencia de un gran golpe en la nuca por parte de su novia.

-Es mejor que cante yo-dijo calmado, y fue ahí donde comenzó a cantar una de las mil canciones que había compuesto para su novia, llena de indirectas hacia su enfermedad. Nunca supo que podía hacerse realidad:

-So you leave tomorrow, just sleep the night.

I promise I will, make things right,

I'll make you breakfast, the way you like,

Before you leave tomorrow, just let me try.

Queen comprendió el por qué de la canción, así que de dedicó a escucharla más detalladamente. Hablaba de ella, como era obvio, de su situación, y llegaba a sentir todas esas letras tocarla con la realidad que estaban escritas. ¿Y si mañana era su día? ¿Y si mañana de iba?

-Before you leave tomorrow, before you say goodbye,

Before you leave tomorrow, before you leave...

Shawn hizo una pausa y ella pudo notar cómo presionaba sus nudillos ante el volante, intentando calmarse. Observó sus labios fruncidos, como si estuviera evitando ese nudo invisible en la garganta como si tuviese ganas de llorar.

-Stay here and lay here, right in my arms-cantó con fuerza mirando hacia la carretera. Queen se sintió feliz, porque por primera vez Shawn se estaba desahogando frente a ella sin ninguna vergüenza-. It's only a moment, before you're gone, and I-hizo un falsete con mucho esfuerzo gracias a las lagrimas, pero de todas maneras siguió-, am keeping you warm, just act like you love me, so I can go on, act like you love me...-y no quiso continuar más, de todas maneras, ya habían llegado.

Sé bajaron del auto y sacaron sus pequeñas maletas del capote y se dirigieron a recepción, pidieron las llaves de su habitación y se instalaron. Era un lugar muy espacioso para ellos dos, sus dos familias alcanzarían ahí sin problema.

-Hoy en la noche tenemos una reservación en el restaurante del hotel-Shawn susurró en el oído de Queen-, hay una sorpresa para ti en el baño. Ponte bonita, como siempre, yo te esperaré ya listo en el lobby.

Tras decir eso, Shawn dejó la habitación fugazmente. La rubia caminó lentamente hacia el baño, encontrándose con una gran caja en el suelo de ésta. Al abrirla, había un vestido largo color canela de su talla. Al verlo mejor, pudo ver las aberturas en la parte de atrás y los detalles al final de él. Era perfecto. Se dio una larga ducha y finalmente se puso el traje que olía a vainilla, se puso los zapatos que venían con el atuendo, se puso unos accesorios y salió de la habitación más hermosa que nunca.

Bajó las escaleras intentando no caerse, dándole al ambiente un lugar tranquilo, donde todos los ojos se posaban en la chica de vestido largo y cabello bien peinado. Shawn nunca creyó que le quedaría de tal manera, así que no pudo evitar abrir su boca sorprendido, provocando a Queen que se sonroje.

-Basta-rió bajo-, tú me lo compraste, debiste haber sabido lo que vendría-y besó su mejilla, dejando un poco de lápiz labial en ella. El joven con traje negro rodeó su brazo en si cintura y se dirigieron a la mesa que había reservado en el balcón del restaurante.

Queen estaba en el paraíso, el lugar era increíblemente asombroso. Del techo, colgaban pequeñas lamparitas iluminando cada esquina del lugar. La baranda del balcón tenia enredada en ella luces navideñas color amarillo, resaltando lo aún más. Y había muchas variedades de plantas, convirtiendo el lugar en algo fresco. Felizmente que no hacía tanto frío en esa zona de la ciudad, sino hubiera sido imposible comer ahí.

Ordenaron lo que Shawn ya había pedido antes, y para la sorpresa de Queen, cada plato era su comida favorita, desde la entrada hasta el postre, que tuvo que pedir segundo plato de este ultimo.

Y como ambos estaban con la comida hasta la garganta, decidieron quedarse sentados un buen tiempo.

Queen hablaba y hablaba, mientras que Shawn fingía estar en su teléfono, cuando en realidad le tomaba fotografías a escondidas. Y como el gran tonto que es, se olvidó de poner el aparato en "silenciador". Así que la rubia pudo escuchar el sonido de la cámara. Roja como un tomate, le pidió a su novio que le mostrará las fotos  que había tomado de ella, y enrojeció aún peor al verlas.  Le ordenó que las eliminara, pero él se reuso. Queen salía perfecta en cada una de las capturas que había hecho, y las tendría de recuerdo. Por último se tomaron una 'selfie' y se retiraron del lugar.

Caminaron por todo el hotel antes de regresar a la habitación, ya que apenas eran las once de la noche y tenían mucho tiempo de sobra, o algo así.

Queen se sentía una reina en el vestido que Shawn le había regalado y no paraba de dar vueltas por todos los pasillos del lugar. Movía su cabello de un lado al otro, jugaba con la ceda de su atuendo y sonreía, siempre sonreía. Y ella no paraba de darle cumplidos a su novio sobre lo apuesto que se veía en traje y como el negro resaltaba sus músculos. Él, como hombre, se sintió halagado ante esas palabras, provocando que Queen riera a carcajadas.

-Estoy cansada-susurró la rubia mientras pasaban entre los jardines del hotel, sin importar el frío que hacia.

-Volvamos-Shawn tomó su mano y se dirigieron al elevador del lugar, porque Queen sería incapaz de subir los escalones. Al estar frente a la puerta del hotel, Queen sintió un impulso en su pecho, queriendo acercarse a Shawn mucho más. Y lo besó.

Algo lento al principio pero más desesperado al final. Y a ciegas entraron a la habitación. Shawn reposo a su novio sobre la cama y él se posicionó sobre ella. Luego fue cociente de lo que estaba ocurriendo.

Apartó sus labios de los suyos y la observó  con el ceño fruncido, preguntando si es que estaba segura de los actos siguientes. Ella sólo sonrió, se acercó a su oído lentamente, causando en Shawn escalofríos y le dijo:

-Estaría encantada.

ay, ya está por terminar todo, mátenme.

4:56am;shawn mendesWhere stories live. Discover now