Capitulo 11; Aguanta.

16.2K 1.1K 259
                                    

_____ Hale;

- Tranquila, Tranquila, Respira, Todo estará bien, Cálmate.- Decía Stiles mientras se acercaba a mí.

- No.... ¿Cuando paso?.-Dije Calmandome y Frunciendo el ceño.

- Ayer, Por eso mismo no estábamos, Fuimos con el.- Isaac dijo sentándose a mi lado.

- ¿Porque No Me llevaron? ¿Porque No Lo Ayudaron?, Maldita Sea.- Dije Tocando mi cabello con brusquedad y jalandolo, causando un ligero dolor de cabeza.

- No Pudimos, No Queríamos Llevarte.- Dijo Isaac tomando mis manos y alejándolas de mi cabello.

- No, Debían Hacerlo, Debían Llevarme, Debían.- Dije Limpiando Mis lágrimas con brusquedad.

Mis Ojos me Ardían por el simple hecho de haber llorado, Además porque Limpiaba mis lágrimas con fuerza y dolía.

- Debo irme, Quiero irme, Quiero Ir al departamento de Derek.- Dije tratando de pararme.

- No, No Puedes, El Entrenador no te dejará, Cuando Regresemos te acompañaremos, ¿Esta Bien?.- Dijo Stiles.

¿Qué Más Podría Decir?.

- Esta Bien.

- ¿Podrían Salir?, Tengo muchos Nervios, No puedo Coser la Herida con ustedes aquí.- Dijo Allison Suspirando.

- Esta Bien.- Dijeron al unisono.

No dije nada, Solo salí.

(....)

Esta vez me había sentado alado de Isaac, Había recargado mi cabeza en su hombro y el me estaba abrazando.

Tenía mis ojos cerrados y sollozaba de vez en cuando.

No podía con esto, ¿Qué pasará conmigo? ¿Qué Haré conmigo misma?.

- Lo siento.- Murmuré mientras me alejaba de Isaac.

- Ya no llores, Tus ojos ni parecen ojos.- Dijo a la vez que soltaba una pequeña risa.

- Cállate.- Dije Haciendo un pequeño puchero.

Y era cierto, Mis ojos me ardían, Sabía que mis ojos se veían diminutos y apenas se podía ver que tenía ojos.

- ¡Señor Lahey, Señorita Hale! ¿¡Qué Demonios hacen!? ¿Qué Rayos Pasa?.-Dijo El Entrenador llegando a nuestro lado.

- Nada.-Dijimos un poco nerviosos.

- ¿Porque Lloras? ¿Acaso este Pedazo de Imbécil hizo que llorarás?.- Gritó dándole un zape a Isaac.


- No, Solo... No Me siento bien, Me duele el estómago, Y la cabeza.-Dije Tocando mi panza.

Parte era verdad; No me siento Bien, Me duele la cabeza, Pero la panza No.

Sentía que el ataque de pánico aún no se había ido del todo, Me costaba respirar, algunos momentos me quedaba sin respirar un largo rato, Hasta que ya no podía más, y eso pasaba cuando el entrenador soplaba su silbato.

Cuando Soplaba su estúpido silbato, cerraba los ojos, No respiraba y cerraba la boca.



Todo esto me tiene confundida, Todo esto me está enfermando, Todo esto me está Matando.

Y sí sigo aquí, Me moriré, aunque sea por un poco tiempo, Me matarán, Ellos Me Matarán, Con sus Peleas contra todo, Ya no quiero, Ya No Quiero Seguir con esto, Ya No Quiero Seguir Con Nada.



- Okay, Tienes que aguantar, No traemos Ninguna Medicina, Aguanta. Aguanta.- Dijo el entrenador, Tocó mi hombro y se fue.


Aguanta, Aguanta.

Quizá pueda aguantar, Puedo aguantar, Pero, ¿Quiero aguantar?, Realmente No Lo Sé, Sin Él todo será diferente, Difícil, U No Creo poder Sobrevivir sin él.




- Tranquila.- Susurró Isaac al momento en que me tomaba de la cintura y me acercaba a él, Empezó a acariciar mi cabello y ahogué un sollozo en su pecho, Y, Repentinamente, Besó Mí Frente.

Era un dulce beso, Pero, Lleno de Lastima. Y, Odio La Lastima, Odio que me tengan Lastima, Lo Aborrezco.



Quería separarme de él, Pero simplemente no quería, Necesitaba un Gran y Fuerte abrazo, Y Que No Me Soltarán.



- Ya No Llores.- Volvió a Susurrar en mi oído, Un escalofrío me recorrió, Lo había escuchado muy fuerte.



Miré mis manos, las uñas empezaban a salir, Mi corazón se empezaba a acelerar, Mis colmillos empezaron a lastimarme los labios, y juraba que mis ojos ya no eran los mismos.


- I-Isaac.- Tartamudeé.



- Demonios, Tranquila, Cálmate, Todo estará Bien, Estarás Bien, ¿Okay? Respira, Respira...


La Pequeña Hale. √√Donde viven las historias. Descúbrelo ahora