Cold || hs [español] ✔

Cinco

Mis sueños estaban llenos de Willow y gemí, rodando en la cama.

¡Despertandome temprano! ¡Hurra! (Realmente espero que hayan captado mi sarcasmo. Debe haber sido extremadamente difícil de encontrar).

Entro en el baño y frunzo el ceño ante mi reflejo.

Misty corre hacia el baño y se va a su pequeña caja. Riéndome, me lavo los dientes.

"Voy a agradecerte adecuadamente por conseguir que Willow apareciera anoche." Señalo hacia Misty con mi cepillo de dientes y ella inclina la cabeza. Me vuelvo hacia el fregadero y escupo la pasta de mi boca.

"Tu realmente no sabes lo que quiero decir ¿verdad? Ah, bueno, eres un gato. No vas a saber lo que es tener un crush hasta que te traiga a un gato macho y los encierre a los dos en una habitación con latas de atún y una cama pequeña para los dos ."

Ella maulla enojada y me río mientras ella camina fuera.

Después de que termine de prepararme, mi desayuno es... cereal. Miro alrededor de la nevera y maldigo cuando no hay leche. Sin embargo, había una botella de alcohol?

Agarro la botella y los cereales que ya estaban en el cuenco, pateando la puerta de la nevera para cerrarla.

Vierto el alcohol en el recipiente, lo mezclo con el cereal y Misty parpadea hacia mí.

"¿Qué?" Pregunto, empujando una cuchara de cereal hacia mi boca.

"Es perfectamente sano."

Y esa es mi mañana. Cada. Simple. Día.

Corrección: Es mi mañana todos los días que me olvido de ir de compras.

~*~

Me senté tranquilamente en la cafetería, a la hora habitual, 1:45. Los minutos habían pasado y ella nunca llegó.

Miré mi reloj.

02:46.

Mis ojos se quedaron donde estaba en el chocolate caliente en mis manos. La campana sonó y significaba que alguien entró.

El viento pasó junto a mí, soplando el aroma de vainilla. Me tensé y por la comisura de los ojos, la vi caminar hacia el mostrador.

"Un pequeño capuchino, con leche, por favor."

Esperó un rato y vi su turno.

El hombre le dio el capuchino que ordenó y ella le dio las gracias, caminando hacia mí. De repente se detuvo y se volvió, saliendo.

Yo quería ir tras ella y preguntarle por qué se fue, pero no lo hice. En su lugar, me levanté y me dirigí hacia mi casa, tomando una ruta diferente para que no pareciera que la estuviera siguiendo.

Mientras corría hasta los últimos escalones a mi casa, ocurrió que Willow estaba justo allí.

Yo sólo tenía que girar el cuello ligeramente y allí estaba ella, mirándome directamente a los ojos. Entonces me di cuenta de las múltiples bolsas en la mano. Su taza de café estaba en el patio y se esforzó en sacra las llaves de su bolsillo.

Pero entonces vi la mirada de miedo en su cara y dejando caer unas cuantas bolsas antes de palmar sus bolsillos traseros y cavar a través de su bolsa.

Exhalo y camino hacia ella.

Cuando llego a ella, casi se cae por las bolsas de supermercado y no pude evitar reirme.

Ella era adorable cuando estaba nerviosa.

Suspirando, se metió la mano en el bolsillo una vez más y frunce el ceño.