Vivir pensando, pensar viviendo.

Bien.

Todo parecía estar bien, quería escribir, pero no sabía sobre qué, y eso me hacía sentir incólume.
Pero no. Me paro a mirar, escuchar, y contemplar mi alrededor, y me doy cuenta que nada está bien, y nunca lo estuvo.
Que las personas más cercanas ahogan penas de maneras autodestructivas.
Que el material termina ganando la guerra, y siempre superando al alma.
Que en un mundo cuadrado, un círculo es literalmente mierda.
Que la televisión basura sigue carcomiendo el intelecto colectivo.
Que la sociedad se inmola, intentando llegar a lo único inalcanzable en el mundo, la perfección.
Aunque antes de seguir quejándome de mi realidad, debería cambiarla, que es para eso que estoy. Las ganas de llorar me están matando, pero las ganas de dar vuelta el mundo me mueven.