Nada Es Casualidad... !

UNA BREVE BIOGRAFÍA

Me llamó Vivian André de la Rúa, tengo 31 años de edad. Y sólo hasta hace un par de años me dediqué a recordar todos los aspectos de mi vida. Pues por una extraña razón, que aún no se cual es, comencé a comprender que nada pasa por que si... Todo tiene una buena razón, las casualidades no existen. Y después de que realice un breve resúmen de mi infancia y adolescencia, sabrán por que lo digo.

Nací un 17 de abril de 1985, faltando un cuarto para las 6 am en el Hospital General de Medellín Antioquia.
Y aunque eso debiera implicar ser buena para levantarme temprano, para mí... hay una lucha infernal cada mañana para hacerlo. Pues las obligaciones apremian.
Se preguntarán por qué se la hora?
La cantaleta diaria de mi madre para levantarme todos los días diciendo que debiera de ser buena para madrugar.
Con sus típicas frases un tanto exageradas...
La que antecede a su cantaleta matutina... Y no falta en ninguna de sus frases:
No te da vergüenza...

Para poder continuar:
Toda una mujer y así pareces un oso en estado de hibernación....

O ya cuando está llegando a su límite del cabreo total:
Levanta ese trasero o tendremos problemas Vivían André HERNANDEZ de la Rúa.
Porque hago la aclaración en mi apellido paterno...
Pues verán...
Mi madre odia a mi padre,
Mi padre es Hernández,
Yo soy su copia exacta, o para resumir... Mi papá es el lechero.
Y lo peor, me dice mi nombre completo...
Es ahí donde te dices a ti misma...
Mi misma... Estamos en problemas, Corre por tu vida.

Soy de signo aries y como mi elemento vital (Fuego), tengo un carácter fuerte.
Aunque antes no creía en horóscopos, eso de ser la hija del dios de la guerra y esas cosas. Pues la religiosidad y las creencias son algo muy importante en la cultura Colombiana.
Aunque ello no fue impedimento para que me interesara en el mundo oscuro y todo lo que ello implica.
Aunque más adelante me arrepentiría de "mi curiosidad".

Crecí con una familia normal, pues en mi país, los hombres tienen cualquier virtud, menos la responsabilidad, y el asumir una paternidad no forma parte de sus atributos.

Mi madre Miriam con 53 años de edad, de estatura mediana, cabello corto y negro, piel trigueña, ojos café oscuros casi negros, contextura mediana, adicta sin remedio a la nicotina.
Con temperamento bastante fuerte al ser papá y mamá al tiempo, de esas personas a las cuales no se les puede discutir porque todo es Palabra de Dios...

Mi Súper abuela, Margaret de 86 años, piel morena, de estatura baja, cabello corto y grisáceo, contextura delgada, rencorosa, medio bocona (de esas personas a las que no se le puede contar un secreto ni a palo porque parece megáfono interradial), pero un enorme corazón.