Confié en una maraca.

#30

La Maca apareció de la nada, no estaba curá y fue la hueá más extraña del mundo.

–Oye ahueoná, un homúnculo culiao me quería agarrar mi potito, le mandé una cachetá, le llegué a dar vuelta la cara hermana, hubierai visto.

–¿No hay tomado nada?

–No, con el show del otro día preferí dejar el copete por un tiempo.

–Ojalá durís.

–Sí po, ¿y tú que onda?

–¿Por qué?

–¿Él Joaco?

–Ah, nada po, sigue con la hueá de que me ama y vo cachai.

–Cometelo luego ahueoná.

–Ah chucha, se me olvidó decirte, me dio un beso y se lo seguí y me siento entera Valeria.

–¡¿Qué?! —Abrió las pepas.

–Hueón, no te pasís rollos, si no quiero nada con él. A mí me gusta, me encanta, él Pablo.

–Pero ya te lo cagaste, y sin ser ná aún.

–Cállate ahueoná, lo único que espero es que no sepa, si sabe me mandaría a la chucha.

–Tenís razón, pero y si el Joaco le dice...

–¡No!, no me hagai pensar hueas ahora por fa Maca.

–Ya hueón, vamos a bailar.

–Estoy cagá de frío, no hueí.

–Ya po Josefa, sirve pa que calentís el cuerpo.

–Después.

–Alerta roja. —Me hizo una mueca con la boca.

–¿Qué hueá? —Miré como ahueoná.

La Maca me hizo la misma mueca.

–¿Te llegó la regla qué hueá?

–¡Ahueona!, él Pablo.

–¿Dónde hueón?

–Derecha po tonta culiá.

–¿Qué mierda hace acá hueón?

–Demás es un espía y te puso un chip pa' buscarte siempre.

–No sé de dónde sacai tanta hueá vo.

–Anda con él.

–¿Tú crei?

–Sí po, anda no más yo voy a bailar.

–Ya, nos vemos después maraca.

Me acerqué al Pablo y le di un abrazo.

–Hola wachito carnuo. —Le dije.

–¿Jose? —Miró extrañado.

–¿Pablo? —Me reí.

–¿Qué haces acá?

–Vine con la Maca y un amigo, ¿y tú?

–Con un amigo igual, está por ahí.

–¡Te he extrañado caleta! —Le dí un abrazo.

–Yo también mi Jose. —Me dio un beso.

Él Joaquín apareció de la nada y le pegó sendo combo al Pablo en la cara.

–¿Qué hueá te pasa? —Le dije al Joaquín.

–¡Josefa, córtala, ésto lo haces para sacarme celos no más!

¿What wea hermanito?