Un Matrimonio Contigo (G-DRAGON Y TÚ)

6. El nombre de este veneno

-Po... ¿Por qué no mejor te casaste con alguien de tu agencia? -

- ¿Ah? ¿A qué viene eso ahora? Estamos en medio de algo importante-

-Es que yo... No me siento suficientemente segura de todo esto...-

- ¿Y eso que? - Termino por sentarse, ahora mis piernas estaban libres

- ¿Como que y eso que? - Le grite

-No lo pensé antes, pero creo que hubiese sido mejor que te casaras con una chica de tu edad y más...-

-Mas... ¿Mas qué? - Me miro curioso ante mi silencio

- ¡Más linda! -

-TN... ¿Alguna vez he dicho que quisiera otra chica? - Tomo mi mejilla con su mano para girar mi cara hacia él

-Eh... De hecho, si, me lo dijiste el primer día que llegue aquí- Se sorprendió ante mi comentario, no lo vio venir.

- ¿Qué? ¿En serio dije eso? –

- ¡¿No te acuerdas?!- Volví a gritarle enfurecida, al parecer el gritarle se había convertido un hábito entre los dos.

- ¡Cállate! ¡No me importa lo que no recuerdo! Además, estoy bien contigo- Note un ligero rubor en su cara. Al parecer le avergonzaba decir este tipo de cosas.

- ¡¿Estas "bien" conmigo?! - Reclame

-Te necesito, ne-ce-si-to para esto. Me gustas lo suficiente- Ahora tenía mi cara sujeta con sus dos manos

-¡No necesito ese suficiente bastardo!- Tome un mechón de su cabello y lo jale hacia atrás para alejarlo de mí.

- ¡Me gustas mucho! ¡Te quiero!- Insistía

- ¡Eso suena a mentira! -

-Sí, yo también pienso eso. ¡Deja de jalarme el cabello, maldición! –

Aun jalando de él se atrevió a separarse de nuevo y mirarme a la cara.

- "Me gustas mucho! y "te quiero! Son mentiras, pero verdaderamente me agradas. ¿Qué hay de ti? ¿Qué piensas de mí? -

-Yo... No lo sé-

- Este chico habla tan egoístamente- Pensé

-Deberías decir que yo también te gusto... En fin, vamos a probar eso en este momento-

-¿Qu...- Atrapado mi boca con la suya, fue un beso muy ligero pero lentamente al separarse lambió mi labio inferior.

Perdí completamente mis fuerzas, ya no esta tan a la defensiva como hace algunos minutos que me beso el cuello. Tan extraño de nuevo... ¿Cómo acabamos así? Hace un minuto estábamos matándonos y ahora en esta situación de nuevo.

-Me has... Lamido. Asqueroso- Su lengua aun la pasaba por mi labio

-Ya no te escaparas de mi- Rio victorioso

- ¡Me hiciste cosas raras y ahora ya no me quedan fuerzas para golpearte! -

-Eso está bien, me agrada... Así que eres del tipo que no se puede mover si se siente bien en esta clase de situación- Susurro en mi oído.

- ¡Eres tan vulgar, me repugnas! -

Debe ser veneno este chico... Había arruinado mi juicio, mi cuerpo y mi cabeza, todo eso en ese orden... El nombre de este veneno es...

GD al día siguiente se quedó para que podamos desayunar antes de que me tuviera que ir a casa, por motivos de "discreción" cuando podía me dejaba calles abajo para que lograse tomar un taxi a la escuela.

-Por cierto, ya que te noto que te incomoda compartir la cama en estos días he desocupado el cuarto continuo al mío para que lo utilices- Dijo muy tranquilo al dar un sorbo a su café.

-Está bien... Gracias- No me atrevía a decirle que no era ya una molestia

Así fue como en la tarde cuando llegue de la escuela, pase algunas de mis cosas antes de ponerme en la sala a hacer mis tareas, siempre me provocaba sueño, nunca me lograba concentrar. El ruido de la puerta que provenía del garaje me despertó y me levante de golpe.

- ¡No INTENTE hacer la cena! - Y si... dije intentar.

-Ya llegu...-

-GD, lo siento, me quede dormida y no hice o compre algo para que cenemos- Lo recibí en la entrada con preocupación en el tono de mi voz.

-Tranquilízate- Rio –Traje algo- Me mostró las bolsas que traía consigo

Las tomé para llevarlas hacia la mesa y comencé a sacar las cosas con cuidado para no tirar nada, vi de reojo como una presencia depravada me observaba.

- ¿Qué ves? - Estaba tan tranquilo recargado en la pared.

-Oh... Nada, tan solo tu arduo trabajo por aparentar ser una buenas es-po-sa- Recalco esto último mientras reía y subía a su habitación.

-Le gusta hacerme enfadar- Refunfuñe para mí misma

El fin de semana había llegado, bien sabía que me encontraría sola como siempre...Camine hacia la habitación de GD para sacar mis últimas prendas de un cajón.

-¿Qué debería hacer hoy?- Me pregunte entre bostezos

Al abrir la puerta mis ojos se encontraron con la peor situación desde mi estadía aquí. GD estaba justamente delante de mí... secando su cabello completamente desnudo...

-¿Hmm?- Se limito a preguntar al verme entrar de manera tranquila a su habitación.

-Q...Q...Q ¿Qué era esa cosa? ¡¿Tan temprano en la mañana?!- Decía exaltada mientras nos encontrábamos desayunando

- ¿A que estas llamando cosa? Que horribles palabras para decir después de haber visto mi desnudez. Además, ya no están de "mañana" ya pasan de las 10 a.m.-

- ¡¿Por qué estás hoy en casa?! Después de habernos casado nunca te quedas sin decirme antes-

-Pues estoy libre hoy, al fin- Contestaba con total naturalidad mientras yo seguía nerviosa

- ¿Eh? ¿Vas a quedarte todo el día en casa entonces? - Pregunte decepcionada

- ¿Qué? ¿No puedo quedarme en mi propia casa? - Me contesto al ponerse de pie y caminar hacia la sala para derrumbarse en el sofá y encender la T.V.

-No...No es eso, pero...-

-En realidad, tenía planes de usar un poco de mi dinero que tengo ahorrado y lo he usado todo este tiempo desde que llegue aquí, justo hoy iría de compras con amigas... No debería de cancelar con ellas, pero GD rara vez está en casa, a pesar de que estamos casados, nunca pasamos tiempo juntos en casa. Esta es una de las escasísimas veces que sucede esto... ¿Qué debo hacer? Todo esto es realmente incomodo- Me decía a mis adentros