Cap 26- Mentiras

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Narra Bers

Me desperte y observe a alvaro mirandome con....ternura jaja si claro

-Donde esta ismael- Pregunte levantandome de golpe
-Wismichu... esta... esta en el hospital- Senti un escalofrio recorrer mi cuerpo con aquellas palabras
-QUE LE HICISTE MALDITO- Alvaro me miro un poco desconcertado
-Alfonso a caso me crees un asesino o algo parecido- No senti remordimiento al decirle eso
-Todo puede pasar- Alvaro me miro con esos profundos ojos miel que me arrepiento de haber conocido
-Bers... perdon Alfonso yo estoy conciente de lo que te hice y se que fui un idiota, tu no merecias ese trato.. pero... pero tampoco te mereces lo que ismael hace contigo- Por dios alvaro deja de mentir
-Y segun tu que me hizo- Conteste friamente
-Se que no me creeras pero nesesitas saberlo, yo vi movimientos sospechosos por parte de ismael asi que decidi seguirlo,obvio sin que el se diera cuenta, estaba platicando con un tipo y le preguntaba si ya habia logrado lo que acordaron, me acerque mas para escuchar de que hablaban y... al parecer del plan de enamorarte, jugar contigo, ganarse tu confianza y sacarte una buena cantidad de dinero, wismichu contesto que nesesitaba mas tiempo y fui cuando esos tipos lo golpearon, yo intente detenerlos pero no lo logre asi que decidi llamar a una ambulancia se que te cuesta creerlo pero esa es la verdad- Ismael no seria capaz de hacerme algo asi
-No... no puedo creer que sus besos, sus palabras todo era un maldito juego- No podia describir el dolor que sentia ahora mismo, cuando crei que todo era diferente resulta que todo era una jodida mentira

Comenze a llorar desesperadamente mientras sentia los calidos brazos de alvaro rodearme, comenze a acercarme mas a el perdiendome en su dulce mirada, hasta que el acorto la distancia uniendonos en un hermoso beso cargado de sentimientos

-Bers... perdon yo- No lo deje terminar porque lo volvi a besar
-Me encanta que me beses- De un momento paso a ser ese dulce alvaro que me reconforto hace un momento y comenzo a besarme con desesperacion sin importarle si me hacia daño

No debo enamorarme de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora