Fuego cruzado.

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Salir a las once de la noche de la universidad era peligroso, me había cansado de escucharlo por parte de mi madre, padre y mi hermano mayor pero era el que podía dedicarle a los estudios y tampoco le daba mucha importancia.

Salíamos de clases de diseño gráfico, mi materia favorita de las que tenía que cursar para graduarme de artista plástica, junto con mi mejor amiga Teresa, ambas llevábamos cada una su mochila con los libros y apuntes del día.
Vestiamos de manera cómoda para sentirnos a gusto en esas cuatro horas de ciclo lectivo diarias, ése día Teresa llevaba unas bucaneras negras (botas altas hasta la rodilla), jean desgastado azul claro, una remera de cuello alto roja y su típica campera de cuero que le daba el toque rebelde; por mi parte llevaba unas botas color marrón claro de caña alta pero más bajas que las de mi amiga, unos jeans azul oscuro, una remera negra básica y encima de ésta un buzo blanco y negro a rayas.

Caminabamos platicando sobre como haríamos el proyecto que el profesor Morales nos habia dejado, pero el tema se desvió rapidamente a como nos íbamos a vestir el sábado para la fiesta de cumpleaños de Tom, gran amigo nuestro.

-Me pondré el vestido que usé en navidad, el azul-dijo mientras subia el cierre de su campera gracias al frío de la noche.
-Debería comprarme uno nuevo, pero no estoy para gastar dinero en eso, quiero poder mudarme y la primera cuota para cerrar el trato es de quinientos pesos, con mi sueldo llego justo-dije desganada.
-Si quieres te presto un vestido y el problema esta resuelto-sonrío mirandome, ella siempre me salvaba en los problemas de moda.
-Gracias Tere, el verde que tienes me vendría bien.

Continuamos la conversacion hasta que llegamos a una esquina donde habia un cajero automático y al frente una plaza donde niños junto a sus padres o algún familiar jugaban.
De repente una moto atraviesa la puerta de vidrio del cajero, era seguro un ladrón, con Teresa nos agachamos para que el este no nos viera mientras que las personas que estaban en la plaza voltearon a ver que habia sido este gran estruendo.

-Tengo miedo Naty, ¿y si nos intenta robar o nos mata o nos viola?-habló alterada mi amiga.
-Tranquila solo hay que moverse rápidamente hacia la cuadra del frente y luego correr hacia la casa de tu hermano, es más cercana que la tuya y hasta que pase el peligro nos quedaremos allí, ¿te parece?-hablé con calma,sin perder la compostura pero con algo de miedo.
-De acuerdo.

Al parecer Teresa no entendió muy bien lo que le habia dicho ya que cuando nos paramos comenzó a correr llamando la atención del ladrón, quién volteó a ver el movimiento, dirijio su mano al bolsillo de su pantalón, tomó un arma y empezó a disparar sin ningún blanco fijo. Apresure el paso y corrí junto a Teresa para no perderla ya que gracias a la acción del ladrón la gente entró en panico y se encontraba esparcidos por la cuadra con caras de terror y gritando.

Nuevos tiros se volvieron a escuchar para cuando Teresa y yo estábamos en la mitad de la plaza cuándo siento un fuerte dolor en mi espalda a la altura del hombro, mientras Teresa grita y cae al piso.Nos habían alcanzado balas.
Teresa comenzó a llorar del dolor mientras agarraba su pierna izquierda por la parte de atrás donde la bala habia impactado. De manera rápida, pero con cuidado, la levante del piso y la hice volver a correr, no podríamos quedarnos allí.
A rastras corriamos. El dolor en mi espalda aumentaba pero intentaba no darle importancia y seguir.

Doblamos la esquina y chocamos contra algo, mejor dicho alguien, mire hacia arriba y dos chicos se encontraban de pié en frente nuestro.
Teresa seguía llorando y ambos chicos nos hablaban, uno intentando calmar a Tere y otro me hablaba a mi, pero no lograba escucharlo y tampoco enfocarlo, mi vista se nublo y caí desmayada.

Gracias A Las Balas ~Nick Jonas~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora