Capitulo 03

382 9 2
                                    

Lo miré algo sorprendida, sorprendida de que hiciera eso y que me tratara como si fuera alguien  que conocía de toda la vida o al menos eso era lo que demostraba esa sonrisa burlona que tenia. Se reflejaba otra personalidad en él, cariñoso, divertido, amoroso, apasionado con lo que tenia, luchador, que quería cumplir sus metas y sueños. Una persona con sentimientos, que quería ser amado, quería un amor apasionado de esos que no puedes estar un día sin ver a esa persona, que esperas que te escriba o te hable aún cuando no lo hace, que confías en él y no lo crees capas de hacerte sufrir aún cuando sabes que lo hará, era otra persona, otra persona escondida en una simple sonrisa.
Pero esa sorpresa, fue remplazada por enojo, un enojo que quemaba cada parte de mi ser  con forme respiraba, era una bola de fuego que subía por mi pecho. En un acto de reflejo levante mi mano y se estrello en su mejilla derecha, provocando que volteara su cara y mi mano ardiera.

- ¿Pero estas lo....?- no le dejé terminar, le di otra bofetada en la otra mejilla, se volteo furioso, ya no estaban esos ojos divertidos y esa sonrisa-¡¿Oye que te...?!

-¡CALLATE!- grité sacando el enojo que sentía por dentro-¡MALDITO INFELIZ, ¿ACASO MIDES  TUS ACCIONES?, VALE MAS UNA CONDENADA MIERDA QUE TÚ. NO SABES CUANTO TE ODIO, IMBÉCIL MALDITO, IDIOTA, ESTUPIDO...- no pude continuar con mi serie de ofensas porque puso su mano en mi boca impidiendome hablar...

- Deja de ser tan agresiva, juro que casi me sacas las muelas- dijo sobandose una mejilla- y deja de decir tanta mierda. Tienes una boca muy linda para que digas esas cosas- Mis ojos se abrieron mas de lo normal. ¿Había  escuchado bien?, mejor dicho. ¿Este era Sander  o era una perfecta imitación  física?  

Quité su mano de mi boca con desprecio, enojo y confusión al mismo tiempo.

- ¡¿Pero por qué me hiciste eso?! 

- Haber calmate, respira profundo y sueltalo- hice lo que dijo mientras sentía que la bola de fuego se apagaba dentro de mí. Ni siquiera sabia por qué hacia lo que me decía.

- Escucha, no se por qué hiciste eso y realmente quisiera saberlo pero no hoy porque estoy demasiado enfada contigo y aparte voy tarde a cenar por tú jodida culpa- sonrió divertido-¡Pues yo no le ayo lo gracioso!

- Tenía que cobrarme lo  que me hiciste en la mañana y lo que dijiste en el parque- lo miré incrédula, pero no dije nada apreté mis puños y lo empuje para comenzar a caminar fuera del callejón hacia mi casa. Lo sentí acercarse, lo ignoraría, si, eso haría, o al menos intentaría- ¿por qué eres tan amargada?- me detuve al igual que él.

- ¿Disculpa?. Ni siquiera me conoces así que no hables si no sabes- retomé de nuevo el camino y él lo hizo también. No dijo  nada, solo se mantuvo  caminando a mi  lado por unos largos e insoportables minutos, hasta que ya no pude ignorarlo mas- ¿No tienes nada que hacer?, como por ejemplo ¿hacer tarea, ir a una fiesta o lo que mejor haces, conseguir una... golfa y revolcarte con ella?

- No, estoy muy cómodo aquí, hoy no tengo conquistas- idiota.

- Pues yo si tengo cosas que hacer, así que te voy a pedir que me dejes en paz, deja de fastidiarme  la jodida vida.

- Oye ya, bajale dos rallitas a tu humor

- Tenemos un trato, Sander, y no pienso romperlo.

- Quiero arreglar las cosas y no comportarnos como dos inmaduros- habló con voz sería, solte una carcajada

- Aquí el único inmaduro eres tu, a mí no me metas.

- Solo quiero tener una buena amistad contigo. ¿Qué hay de malo en eso?

- Que yo no quiero tener amistades ni contigo ni con nadie. Tu y yo no  podemos ser amigos porque tenemos cosas muy diferentes y también porque mi orgullo es muy grande para... nada, ya olvidalo- suspire y me gire para verlo- Mira yo no quiero tener ningún tipo de relación contigo, por el simple echo de que no me caes bien. Y si, soy una perra muchas veces, pero así soy, no temo decir la verdad en la cara de las personas

Trato Echo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora