Cap 6

44 6 7
                                    


Había vuelto a casa atontada, Estaba más feliz de lo normal, mi corazón estaba acelerado y sentía que volaba...¿Qué rayos me está pasando?

Dejando esa sensación de lado, el día fue agotador y se podría decir: Demostrativo. Sinceramente la conversación con Michael me había liberado por completo de mis dolorosas ataduras. Estaba viendo el mundo con otros ojos; Estaba viendo color en los paisajes; Estaba valorando la naturaleza y sobre todo: Valorando a ese gran sauce en el cual deje todas mis penas atrás.

A veces me pregunto si el universo y las estrellas quieren hacerme malas pasadas intencionalmente, y luego corregir su daño con un momento feliz. Sinceramente me da completamente igual. Sea un momento, lo voy a disfrutar como nunca antes. Mike me enseñó a decidir como iría el día, me enseñó que las cosas malas pasan, pero no son eternas. El me está mostrando el mundo.

Cuando estoy cerca de llegar a una meta, siempre me hago conjeturar que hay algo que me lo impide. Pero no es asi, siempre he tenido maravillosas oportunidades en la palma de mi mano, Sólo no supe valerlas. Ahora siento que puedo con lo que se me empalme, siento que puedo derribar murallas si se me apetece. ¡Y pensar cómo ha cambiado mi mentalidad con solo unas palabras!

Sus palabras...

¡Demonios! ¿qué estoy diciendo? Melanie DESPIERTA. Michael sólo es un amigo, y tu lo calificas como tal. ¡Por supuesto que sí!

Se hacía de noche. Dejé de pensar por un momento, y caí en cuenta que había llegado a casa, y al estar en mi propio mundo, no había atravesado el marco de la puerta desde que retorné.

-Si seré idiota...- Dije con una leve risa. Tomé las llaves y las puse en la cerradura. Acto siguiente, me adentré exhausta en mi hogar. Me dirigí hacia la habitación de mi madre con la esperanza de encontrarla allí, Para poder dialogar con ella, decirle cuanto la amaba y cuanto sentía mi actitud pesimista durante todos estos años que llevo adoleciendo. Efectivamente, allí estaba. Me regaló una mirada nerviosa al no saber cómo habría tomado sus disculpas en forma de desayuno, que por cierto había estado fabuloso. Para quitarle esa sensación horrible llamada "nervios", le dedique una gran sonrisa.

-Mamá...- Y corrí a abrazarla. Por supuesto, ella correspondió a la perfección y me acarició con sus mágicas manos- Gracias por todo lo que has hecho por mí, lamento haber sido tan egoísta, pensando únicamente en mí y para colmo de males, pensando en mi de forma negativa. ¿Sabías que te amo, y que siempre lo he hecho? ¿Sabías que eres una Supermamá? ¿Tienes una idea de lo mucho que te has esforzado por cuidarme y protegerme?- Manteniéndola en mi abrazo, siento como solloza en mi hombro.- Mamá, ¿por qué lloras?

- Porque eres fabulosa, Mel. Te amo hija- Y me correspondió el abrazo con mucha más fuerza mientras acariciaba con suavidad mi cabello- Mi preciosa pequeña... No hubiese querido a nadie más, tú eres el ejemplo de hija que soñaba a tu edad. Eres la indicada, la que siempre quise. Lo sabes, no?- sonreí en su pecho y respondí amorosamente

-Lo sé, Mamá...Siempre lo supe.

Me miró con una sonrisa de extremo a extremo, Besó mi frente y no hubo nada más por decir. Cada una avanzó un paso, y seguimos con lo que realizábamos.

Me adentre aún más feliz que antes en mi habitación, y en ese preciso momento, mi celular marca:

"Llamada entrante: Mike "

Mi celular sonaba al ritmo de una pegadiza canción, mientras yo me había quedado congelada. ¿A qué se debía su llamado? ¿Debería contestar? había que averiguarlo de una u otra manera, e iba a quedar mal si le escribía minutos después, se daría cuenta que no quiero atender. Pero vamos, Nada malo podría pasar, no?

WASTED- @EmiSolerWhere stories live. Discover now