ne me quitte pas

4.7K 1K 211
                                    

(recomiendo que escuchen la canción multimedia mientras leen [lo que está entre '«»' es la letra de la canción])


╭───────╯†╰───────╮

╭───────╯†╰───────╮

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

«no me abandones...»

HoSeok mira con los ojos nublados y lastimados, por las luces rojas y azules en un constante parpadeo que atosiga, que hay demasiada gente. En especial gente vistiendo de blanco.

«hay que olvidar, todo se puede olvidar»

Una camilla sale, cubierta con una tela blanca. Sabe quién está allí, lo intuye. Su corazón se congela, su boca se abre intentando descifrarlo... y con desespero corre hacia ellos. Grita tratando de zafarse de los brazos del oficial que le impide avanzar.

 ¡TaeHyung!

Los especialistas lo miran con pesar mientras conducen el cuerpo a la camioneta. HoSeok sigue tratando de liberarse golpeándose constantemente contra el pecho del hombre que lo detiene.

 ¡suéltenme! ¡TaeHyung! ¡levántate! ¡levántate! ¡no me dejes!

«olvidar el tiempo de los mal entendidos, y el tiempo perdido... a saber cómo.»

Los gritos de HoSeok se hacen más estruendosos que el mismo cielo nublado con sus truenos amenazadores. Las lágrimas comienzan a arremolinarse en sus cansados ojos. Quiere correr hacia él, quiere tomarlo, pedirle que se levante... quiere... quiere...

 joven, no hay nada que hacer... él está--...

 ¡cállate! ¡TaeHyung! ¡TaeHyung, por favor, regresa... no puedes abandonarme! ¡regresa! ¡regresa maldito imbécil!

«olvidar esas horas que mataban a veces a golpes de por qué el corazón de la felicidad.»

Los brazos de HoSeok se rinden cuando el cuerpo es retirado con éxito del edifico. Los murmullos a su alrededor comienzan, la mayoría es de señoras gordas con su voz asquerosa llena de cizaña, preguntándose por qué habría hecho aquello el frío chico de la camilla. HoSeok mira a todos con odio. Con rabia. Con dolor.

«no me abandones...»

 ¡cállense! ¡no saben nada de él! ¡nada! Largo de aquí...

«... no me abandones...»

Su voz se convirtió en un sollozo al pronunciar lo último. Sus rodillas se encuentran con el duro asfalto al no poder sostenerlo más. El oficial lo ha soltado pero no se ha marchado, sigue allí, a su lado, quizás preguntándose qué debería decir ahora...

«... no me abandones...»

HoSeok odia no saber por qué hay tanta gente ignorante y morbosa deseando saber qué pasó allí. Odia no saber por qué TaeHyung se fue, sin siquiera mencionarlo, sin siquiera despedirse apropiadamente... todo después de hacer el amor. 

Odia no saber por qué mierda se colgó mientras él iba por comida. 

Odia no haber regresado antes, todo por haber estado pensando en qué galletas le gustarían más al menor y aún más por la estúpida fila del supermercado. Odia que sus vecinos hayan visto la figura de TaeHyung balanceándose cada vez más lento y hayan llamado a emergencias.
HoSeok odia todo ahora mismo.

«no me abandones...»

HoSeok odia no haberle dicho antes todo. Todo lo que le podía prometer. Todo lo que estaba dispuesto a hacer por él. Todo lo que le podría haber aferrado a la vida.

«... yo... te ofreceré perlas de lluvia, venidas de países donde no llueve... escarbaré la tierra hasta después de mi muerte para cubrir tu cuerpo de oro y luz... haré un reino donde el amor será el rey, donde el amor será la ley, donde tú reinarás.

No me abandones...»

HoSeok odia sentirse muerto en vida tan rápido, pues el sentimiento lo embriaga apenas vio salir aquella camilla y escuchó susurros de los vecinos mencionando el número de su departamento. Apenas intuyó de aquel delgado cuerpo...

«... yo inventaré palabras imposibles que tú comprenderás... te hablaré de aquellos amantes que vieron dos veces su corazón arder... te contaré la historia de ése rey que murió por no haber podido encontrarte...

No me abandones...»

Se sienta en el pavimento, los sollozos no han parado. Pisa, sin querer, la bolsa en la que posee todas sus compras. 

«... acaso no se ve a menudo resurgir el fuego del antiguo volcán que de creía demasiado viejo. Acaso no existen tierras quemadas que dan más trigo que el mejor de los abril. Y cuando llega la noche para que el cielo arda el rojo y el negro ¿acaso no se unen?

No me abandones...»

Odia pensarse sin TaeHyung.

«... no... no me abandones... no lloraré más, no hablaré más... me ocultaré ahí... para mirarte bailar y sonreír, y para escucharte cantar y después reír. Permíteme convertirme en la sombra de tu sombra, en la sombra de tu mano... la sombra de tu perro...
...
No me abandones...
No me abandones...
TaeHyung...
No me abandones...»

╰──────╮  † ╭──────╯

╰─────╮ † ╭─────╯

╰────╮ † ╭────╯

╰──────╯ 

protège - moi → vhWhere stories live. Discover now