Capitulo 1 "Esos Ojos"

8 0 0
                                    


No quiero que piensen que es una historia de terror, porque no la es, aunque algunas cosas puedes encontrarlas extrañas. Como ese día o más bien noche en que me desperté solo recordando unos ojos cafés, como si me hubiesen observando de frente mientras dormía, pero solo estaban presentes en mi mente y más allá de eso, no había nada, ningún rostro definido o tono de voz, solo unos increíbles y cálidos ojos obscuros. Me demore algunos segundos en recobrar la movilidad de mis extremidades, como si hubiesen estados congelados y torpemente estire mi brazo hacia el velador para tomar mi celular, el brillo de la pantalla me dejo ciega por algunos segundos hasta que pude acostumbrarme a este. Las 4:36 AM, todavía podía seguir durmiendo, además estaba de vacaciones. Dejé mi celular sobre la mesilla y volví a acurrucarme entre las mantas, tratando de volver a soñar con aquellos ojos, pero ustedes saben. Cuando un sueño es interrumpido, ya no se vuelve a soñar con lo mismo, más bien es uno quien se imagina las cosas que pasan mientras intentas quedarte dormido otra vez. Yo solo quería esos ojos... Esos ojos.


A la mañana siguiente no recordaba haber soñado nada, así que como de costumbre realice mi rutina diaria de aseo y luego el vestirme. Tome desayuno con la música en la radio de fondo para una vez terminado lavar mis dientes. Quería salir a caminar, dar una vuelta y que el frío del invierno calara mis huesos, pusiera rosa mi nariz, mientras la música de mis audífonos me rodeaba. Así que eso hice, camine por la costanera, algo desierta a estas horas de la mañana, ya sea por ser un día de semana en hora de trabajo o porque a pesar de haber sol, esté no calentaba, solo estaba como un hermoso adorno en el cielo. Cerré mis ojos por un instante, sintiendo la brisa besar mis mejillas. Y al abrirlos unos ojos obscuros se cruzaron con mi mirada. Un joven paso a mi lado, mientras trotaba, y se alejó a paso rápido. Pero sé que esos ojos obscuros me reconocieron, los sentía tan familiares, aunque estaba consciente de que nunca había visto al portador de dichos ojos. Dejé de contener el aire que ni siquiera sabía que tenía retenido en los pulmones y seguí caminando, dejando de lado esas sensaciones, a pesar que todo mi cuerpo gritaba por querer caminar hacia el muchacho.


Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 09, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Dimensiones Donde viven las historias. Descúbrelo ahora