Nagisa a desaparecido después de pelear con Karma, teniendo todo en contra para poder ser libre
Dejando a todos sus amigos confundidos y mucho mas a un pobre pelirrojo que se quedo con tantos sentimientos atrapados dentro de él.
La clase 3-E hace lo...
Veía sus ojos fijos sobre mí lo que me indicaba que estaba siendo muy serio con ello pero no quería perderlo... no lo soportaría, necesitaba que Karma estuviera a mi lado para no perderme a mí mismo y si le decía que lo amaba y no era correspondido... lo más probable era que se hiciera imposible volver a pasar tiempo juntos
¡NO! ¡NO LO PERMITIRÉ! Soy egoísta lo sé y probablemente sería mejor si le dijera lo que siento antes de arrepentirme por el resto de mi vida *Karma no importa lo que pase te amare eternamente* pensaba Nagisa quien aún seguía en silencio frente a su amigo
~solo te veo como mi mejor amigo Karma-kun~ dijo Nagisa dando la mejor sonrisa falsa que pudo intentando que sus lágrimas no se escaparan
Después de eso se escuchó un suspiro de alivio por parte del pelirrojo el cual miro a Nagisa y soltó su agarre solo para mostrarle una enorme sonrisa, aquel suspiro habia confirmado los temores de Nagisa consiguiendo que su corazón se estrujara rápidamente *sabia que era imposible que sintiera algo por mí* pensó el peliceleste apartando todos aquellos sentimientos que lo lastimaban para poder disfrutar de la compañía de su "amigo"
De repente el teléfono de Karma empezó a sonar mostrando en la pantalla el número de su madre *demonios* pensó el ojidorado
~espérame aquí Nagisa-kun, regreso en un minuto~
Karma se había perdido entre los arboles hablando con su madre y Nagisa se quedó ahí parado sin hacer ningún movimiento, al poco rato Nagisa cayó de rodillas al suelo mientras una que otra lágrima se escapaba ~te amo~ dijo el ojiceleste claramente mientras se llevaba sus manos a su cara para poder intentar parar sus sollozos o Karma se daría cuenta que había estado llorando ~te amo demasiado no lo puedo soportar pero no quiero alejarme de ti~ seguía diciendo el chico en voz alta seguro de que nadie lo escucharía
Después de calmarse Nagisa saco un pañuelo del bolso que le había dado su madre, se limpió la cara y las rodillas que se le habían ensuciado y se dispuso a esperar a su amigo, pronto Karma apareció nuevamente viendo por detrás a Nagisa quien admiraba la belleza de aquella noche en el lugar más hermoso que había encontrado
~Nagisa-kun ¿quieres jugar un poco?~
~ ¿Jugar? ~
~¡claro! Yo soy el príncipe y tú eres la princesa que se desvistió para agradecerle a su príncipe por haberla salvado~
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~creo que tienes una idea equivocada de la pureza de las princesas Karma-kun~
~¿ehhhh?~ dijo el pelirrojo sonriendo y acercándose a su amigo
Karma extendió una manta en el suelo mientras la sujetaba con unas rocas para que esta no se fuera volando, ambos amigos se quedaron conversando ahí felices de todo sin preocuparse tan siquiera de la hora
