06.

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La piyamada y una llamada.

Narra Kelly.
Vida real.

Tire la moneda por los aires y cuando calló...

Dio cruz.

_ ¡Cruz! - chillo Antonela.

_ Ahora los nervios me comen viva. - dije.

_ Sólo habla tranquila con el y se tu misma. - me dijo Emily.

_ Si, no es tan difícil. - dijo Kimberly mientras se llenaba la boca de comida.

_ Pero se mantiene calladas. - les advertí.

_ Okey. ¿Que haremos mañana? Tenía ganas que fuéramos al centro comercial. - dijo Antonela.

_ Yo mañana no puedo. - dije mirando el celular.

_ ¿Por qué? - pregunto Kimberly.

_ Voy a salir con un chico a tomar algo.

_ ¿Quien es? ¿Es guapo? ¿Yo lo conosco? ¿Es tu novio?... - le tape la boca.

_ Es un chico que se llama Mordecai, se puede decir que es lindo. Creo que si lo conoces y no es mi novio. - conteste todas sus preguntas en orden y quite mi mano.

_ ¿Mordecai Alson? - dijo Kimberly con sus ojos brillantes.

_ Creo que te si ¿Por qué? ¿Te gusta? - dije sin mirarlas.

_ Es que ese chico salió con mi hermana y la engaño. Por favor ten cuidado con el. - me pidió Kimberly.

_ Sólo vamos a salir a tomar algo no... - el sonido de mi celular me hizo tragarme las palabras. - Es Harry. - murmure. - Creo que no le contestar.

_ ¡CRUZ! - gritaron las tres.

_ Okey, contesto.

Conteste la llamada y lleve el celular a mi oreja.

Yo: ¿Hola? - dije nerviosa.

Harry: Hola... - se escuchó su voz.

Yo: Hola...

Harry: Hola. Lo siento ya dije eso, - reí bajito. - que linda voz tienes.

Yo: Gracias ¿Que haces?

Harry: Estoy llendo a la casa de mi mamá ¿Y tu?

Yo: Estoy con mis amigas. Creo que tendríamos que hablar después, no quiero que tengas algún accidente.

Harry: Bien te llamare otro día. Fue lindo escucharte Kelly.

Yo: También fue lindo escucharte Harry. - le dije. - Espero que te valla bien. Hablamos luego.

Harry: Hablamos luego...

Corte la llamada y mis amigas me miraban con una sonrisa en sus caras. Solté una carcajada y me tire en el sillón.

Y así transcurrió la noche, entre chistes, películas, risas y mucho helado. Cuando nos dio sueño decidimos irnos a dormir.

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