Disillusion [ 남진 ] Mini-fic ( 1ª temporada )

2.

El aire allí arriba era más frío pero también más puro y agradable. La azotea del instituto era el lugar perfecto para gozar de soledad y paz, Namjoon era el único que cada día subía a ese lugar para estar consigo mismo, pues ningún otro ser parecía comprenderle.

No se dió cuenta de que le habían seguido hasta que el golpe de la puerta metálica al cerrarse le asustó interrumpiendo su paz. Ya se había sentado en el suelo y estaba a punto de quitarse su angustioso pullover y sentir el viento helado en su piel pero se mantuvo con la prenda puesta, porque el menor era aficionado a observar, se le daba bien, y no quería que viese más de lo necesario.

Seokjin se acercó hasta su lado sin sentarse y dejó su mochila en el suelo.

-¿Faltas a clase para venir aquí?

No se molestó en contestar y el otro tampoco esperó la respuesta. Seokjin caminó por el lugar mirando el suelo y percatándose de varias marcas de sangre seca en diferentes lugares, la barandilla entre ellos. Un escalofrío recorrió su espalda al pasar sus dedos sobre la mancha de la barandilla y el lugar comenzaba a inquietarle.

Regresó con Namjoon y se sentó a su lado. Observó el rostro contrario para nada feliz y se culpó de ello.

-Namjoon, hace frío y este lugar es siniestro. Volvamos a la clase.

-Este lugar era perfecto cuando era solo yo quien venía. ¡Vete tú solo a tú maldita clase y déjame en paz!

Namjoon se puso sus auriculares y de tumbó en el suelo con la música aislándole de todo y todos al máximo de volumen. Sus palabras despertaron mal estar en el menor. No se creía merecedor de tal desprecio, no había hecho nada malo intencionadamente pero Namjoon se había molestado con él y debía arreglarlo.

Tocó el hombro del castaño con la punta de sus dedos, haciendo que abriera los ojos y le mirase molesto. Se acercó más a él y sacó los auriculares de los oídos.

-Namjoon, lo siento. ¿Hice algo que te molestó?

-No me dejas seguir con mi vida normal, eso es suficiente para joderme. ¿No puedes tan solo ignorarme?

-No quiero ignorarte. He obrado mal y tengo que hacer algo al respecto. - Le devolvió sus auriculares cuidadosamente. Se arrepentía de afectar negativamente la vida de otra persona. - "No te desvíes a la izquierda ni a la derecha; aparta tu pie del mal" (Proverbios 4:27)

-¡Lo que me faltaba! Por favor, no empieces con mierdas religiosas. Ya estabas tardando.

-No hables de esa manera de mis creencias.

-Soy todo lo contrario a tus creencias. Tu Dios me odia.

Esas palabras calaron en su corazón porque era la primera vez que escuchaba las palabras "Dios" y "odio" en la misma oración. Si a él le habían dolido aquellas hirientes palabras daba la sensación de que a Namjoon también, y así era.

-Eso no es cierto, en Dios no hay más que amor, y todos son aptos para recibirlo, tú incluido.

-No intentes absorberme. Puede que no sepa mucho del Cristianismo pues soy ateo, pero sé lo justo. Atención niño bendito porque lo que te voy a decir atenta contra tu Dios. - Seokjin tragó duro temiendo que lo que escucharía a continuación fuese insoportable. - Soy homosexual, sé que eso no os gusta. Disfruto de eso que llamáis pecados.

-¿Qué significa "homosexual"?

-¿Estas de coña?

Negó con la cabeza, porque no estaba de broma. Todo lo relacionado a la sexualidad había sido omitido de su vida, las monjas nunca le habían hablado de ello y era la primera vez que escuchaba esa palabra.

-Homosexual significa que te atraen las personas de tu mismo sexo. Me gustan los hombres, Seokjin.

Entendía a qué se refería. Había leído ciertos pasajes que hablaban de ello.

-Namjoon, ¿repudias a Dios por esa estupidez? Es cierto que en mi religión se manifiesta el deseo de la unión carnal exclusiva entre personas de sexos opuestos, pero es algo idiota dicha limitación.

-Te estas quedando conmigo... ¿Cómo puedes llamarte cristiano diciendo semejante blasfemia.

-No es blasfemia, es coherencia cristiana. Yo creo que Dios lo que quiere es que seamos felices, que compartamos nuestro amor con el prójimo. Dios jamás limitaría la expansión del amor.

-Seokjin... - El mayor estaba sorprendido de la integridad del contrario y pensó que quizá no rechazaría tanto la religión sí las personas fuesen más como aquel chico. - ¿Ves con buen ojo las relaciones entre hombres?

-Y entre mujeres. Verás... - Tomó asiento junto al cuerpo contrario apoyando su espalda en el muro al igual que Namjoon. - Es cierto que existen grandes contradicciones y sin sentidos en la historia del Cristianismo, pero todo eso deben de ser errores de transcripción, algún fallo de los copistas. La bondad de Dios es infinita, él jamás excluiría a ningún ser, solo el ser es capaz de alejarse de Dios si así lo desea.

-Creo... Lo siento, Seokjin. Creo que me equivoqué contigo.

-No pasa nada Namjoon. Como te decía, hay errores que deben ser subsanados y quizá las respuestas se encuentran en los lugares más inhóspitos, como por ejemplo en la cabeza de un extraño chico ateo.

-Insinúas que tengo las respuestas de las fallas de tu religión. Por mucha palabrería que sueltes no conseguirás que crea en Dios, te lo advierto.

-No es esa mi intención, lo juro. Lo que quiero es aprender otras maneras de ver la vida, otros pensamientos. Una mente debe ser como una esponja y absorber conocimiento útil y expulsar lo inservible. De la misma manera que tú no crees en Dios, yo no dejaré de creer en él, mi fe en él es eterna.

-Yo... Supongo que esta bien.

Sujetó las grandes manos de Namjoon, estaban heladas pero eso no le detuvo.

-¿Está bien si pienso que somos amigos?

-... Sí, está bien.

"Pero si hacéis acepción de personas, cometéis pecado, y quedáis convictos por la ley como transgresores"
(Santiago 2:9)