GÉMINIS

Acto Segundo

Título: GÉMINIS

Autora: Clumsykitty

Fandom: Marvel cómics y MCU.

Pareja: Stony yeah!

Derechos: solo tengo derecho a quejarme.

Advertencias: esta historia combina un tanto el MCU con algunas versiones oscuras de nuestro héroes favoritos (Capitán Hydra y Superior Ironman) para satisfacer como siempre, a la imaginación exaltada de esta minina perdida. Un discreto homenaje a las historias que me han hecho amar con pasión el Stony, Steve-Tony Verse y Brainwash, con amor para sus fantásticas autoras.

PRECAUCIÓN: CONTIENE ESCENAS ALTAMENTE VIOLENTAS.

Gracias por leerme.

ACTO SEGUNDO

"... el mundo cambia de forma material pero no espiritual seguimos en la misma senda de lo primitivo que dicta nuestra consciencia disfrazando nuestros actos bajo los términos de una llamada ética moral dispuesta de tal forma que los peores pecados son tolerados como una forma de convivencia necesaria y es por eso que puedo ver a plena luz del día a un hombre mayor con canas en el cabello meter su mano debajo de la falda de una adolescente para manosearle sin que el resto de los adormilados pasajeros lo note cuando uno diría que los adultos tienen como una de sus metas de vida la protección de las nuevas generaciones más la realidad me ofrece otro discurso más grotesco y ciertamente muy hipócrita pero hay tres hombres alrededor que han notado aquello sin inmutarse al tiempo que se relamen sus labios al ver el sonrojo en la chica que trata inútilmente de salir del hueco entre el pasamanos y la puerta del autorriel dentro del cual viajamos..."

Por mi madre, la bitácora de Géminis, cuya letra y narrativa me dicen que le pertenece al varón, al Capitán Nómada, estaba llena de estas escenas inquietantes sin fechas, nombres o descripciones de lugares que pudieran arrojarme dato de su estadía. Ellos dos se deleitaban observando a las personas ajenas al peligro con el que estaban, seleccionando bajo aparente azar a sus víctimas con una reflexión filosófica de la vida y la muerte como marco argumental que sustentara sus violentos crímenes. No tenían corazón, algo que ya sabía desde hace mucho.

"... grita pero su grito queda ahogado entre los borbotones de sangre provenientes de su garganta abierta por el cuchillo dentado más oxidado que mi tesoro sujeta tomándose su tiempo para cortar los músculos y tendones de la elegante mujer con los senos al descubierto bañados en ríos carmesí lo que me hace sonreír debido a la mueca de fastidio de mi amante pues las vértebras del cuello son difíciles de separar con un arma punzocortante sin filo que le robamos sangrienta pero exquisitamente al traficante de estupefacientes en aquel salón de baile más la terquedad de mi amor no conoce límites igual tampoco sus caprichos así que no tengo más remedio que esperar paciente hasta que el hueso al fin cede y un crujido antecede la caída graciosa de la cabeza con cabellos descompuestos que rueda hacia su pequeño hijo..."

Tuve que hacer una pausa, tomar aire fresco porque aquellas lecturas estaban comenzando a volverme loco. De ser ciertos todos aquellos crímenes escritos, eran más de los que se le adjudican a Géminis. Para su desgracia, resultaba fácil ir recopilando en la red todos aquellos eventos más o menos similares a los de su diario, dándonos la posibilidad de triangular sus posiciones, sus movimientos y claro, su última ubicación. Los ordenadores de mi casa estaban al tope, descargando cuanto dato que concordara con los patrones, formando una lista de lugares y víctimas con nombre. No me extrañó encontrarme algunos casos aparentemente resueltos, o que se afirmara pertenecían a otro asesino suelto. Habían cubierto sus huellas durante todo este tiempo no solamente borrando las huellas dactilares, eliminando cabello o piel que pudiera registrar su marca genética, también desapareciendo su andar culpando a otros de sus crímenes.