Perfectos Desconocidos

Capítulo 31: ¿ME QUIERES, O NO? ¡DECÍDETE!

Llegué a la Universidad y me encontré a Angélica, ella me pidió que la acompañe al bar a comprar unos snacks de queso, en el camino vimos a Evan, él estaba conversando con un chico. Llegamos al bar y Angélica compró los snacks, fuimos de regreso al aula, pasamos junto a Evan y me dio mucha vergüenza mirarlo después de haberle cantado All I want for Christmas is you en pleno bar frente a todos sus amigos, así que agaché la mirada y seguí conversando con Angélica.

-Estoy muy preocupada mañana es el examen de Matemáticas y hay algunos temas que no domino, le dije angustiada mientras miraba al piso ya que estaba pasando junto a Evan

-Ammm, ehhh... Balbuceó Angélica.

-¿Qué te pasa? Te estas embarrando toda la cara de queso, empecé a reírme.

-Es que Evan volteó a verte mientras yo comía los snacks de queso y me puse muy nerviosa, por eso me ensucie toda la cara, respondió apenada.

-¿En serio me quedó mirando? No me di cuenta, es que me dio mucha vergüenza mirarlo a los ojos después del show que hice ayer. ¿Tú crees que me escuchó cantarle?

-¡Claro que te escuchó! todos los que estábamos en el bar el día de ayer te escuchamos cantar, capaz está emocionado y por eso te ha vuelto a mirar.

Evan Anderson mi duda y mi respuesta, mi alegría y mi enfado, mi paz y desesperación ¿Quién te entiende? ¿Me quieres o no? ¡Decídete! No me gusta este juego. ¿Por qué me ignoras por un largo tiempo? Y luego me miras como si nada hubiese cambiado. ¿Por qué me ilusionas y luego me decepcionas? ¿Por qué soy tan débil? Con tan solo una mirada tuya haces que vuelva a caer en tu trampa, quiero superarte y tú me envuelves con tus dulces ojos avellana que es imposible resistirse.

Terminamos el examen de pintura. Jack dijo que quería hablar conmigo en privado y aunque me asustaba la idea de hablar a solas con él, accedí.

-¿Qué quieres decirme? Le pregunté mientras nos sentábamos en el balcón que esta fuera del curso.

-Quería decirte que tienes toda la razón, y a mí me cuesta darle la razón a la gente, pero si tienes toda la razón.

-¿Qué? Pero de ¿Qué? ¡No entiendo nada!, le respondí con un gran gesto de confusión.

-¿Recuerdas esa vez que peleamos, porque tu dijiste que no era conveniente que mi mejor amigo este ilusionado y ande atrás de una de nuestras compañeras de clases?

-Si...

-Bueno tenías razón, ella ahora tiene enamorado.

-Te dije que a ella le gustaba otra persona.

-Por eso te estoy dando la razón, mujer de Dios. Lamento que hayamos peleado por eso aquella vez, después de todo tenías razón.

- Bueno, yo solo no quería que alguien salga lastimado, es todo.

- Para la próxima escucharé más tus consejos Amy.

-De acuerdo, casi siempre tengo la razón, respondí con un tono de broma.

Cuando terminé de hablar con Jack, Evan pasó y alzó la mirada me vio por unos segundos, yo me emocioné y me puse muy nerviosa que me escondí detrás de un pilar.

-¿Por qué te pones así? Eres muy obvia.

-Es que me pongo muy nerviosa cuando él me ve, respondí.

-Sí y mucho, él te miró por unos segundos, ni siquiera me miró a mí y eso que estudiamos juntos en el colegio.

-Obvio que a mi miró, no tendría por qué mirarte a ti, le dije bromeando.

-¿Qué te pasa? yo soy muy sexy, me siguió el juego.

Yo solo me reí y nos despedimos, luego fui al bar con Angélica y Johana a tomar un café.

Mientras caminábamos Evan venía de frente con una chica bajita, rubiecita y de cara muy tierna, la verdad no me dio celos, yo quería ser valiente y mirarlo a los ojos, pero cuando alcé la mirada con los ojos que me topé no fueron los de él sino los de ella, cuando Evan se percató de que yo pasaría a su lado, él se alejó de la chica bruscamente. No quiero sacar conclusiones ni ilusionarme, pero igual pensé en las razones del porque lo hizo.

Quizá no quiso que la vea con ella, o no quiso que malinterprete la situación y que solo son amigos, cual fuese el motivo no importa, por alguna extraña razón no me dio celos.

Nos sentamos en una mesa a tomar café, después llegó Evan y se sentó en la mesa de en frete con un grupo de amigos, minutos más tarde me llegó un mensaje de Hailee para encontrarnos en la Biblioteca y avanzar con nuestro proyecto de Metodología de la Investigación. Me despedí de las chicas y me dirigí a la Biblioteca, unos segundos después las chicas me bombardearon de mensajes y fotos de Evan, diciéndome que él seguía en el bar y que debía ir, pero no podía dejar a un lado mi proyecto por Evan, aunque me hubiese gustado estar en el bar cerca de él.