Drinking Problem

c h a p t e r t w o

Sigo sin entender como mierda lo hace. Logro encontrarme.

Escuche la puerta de la entrada abrirse y me encogí en mi lugar. Pronto se hicieron oír gritos de furia y pisadas fuertes como de un monstruo que iba destruyendo todo a su paso acompañadas de muchas, muchas groserías.

Estuve hiperventilando hasta que escuché como abrían de golpe la puerta del dormitorio y ahí contube la respiración. Se oía mucho movimiento en el cuarto, como movía y aventaba cosas preguntando donde estaba. Pronto sentí como abría las puertas del closet y por alguna extraña razón los cajones. El alcohol es malo chicos.

Vi como abría la gaveta por donde subí y luego la siguiente para cerrarlas de golpe al no encontrar lo que buscaba. Escuche que soltó un suspiro y pensé que no seguiría buscando hasta que se abrió la tercera gaveta.

Intente hacerme más pequeño en mi lugar y hacer el menor ruido posible.

Se abrió la cuarta gaveta, donde estaba.

Paso la mirada por el lugar. En esa parte se encontraban mis pies.

Cerro la puerta de golpe.

Salte en mi lugar y me pude tranquilizar. Aparentemente no me encontró.

Se abrió la quinta y ultima gaveta. Paso la mirada y aunque estaba más tranquilo no me duró mucho.

—Ahí éstas hijo de puta. -me tomó por el pelo y me jalo logrando de alguna manera sacarme de ahí haciendo que cayera estrepitosamente al suelo junto con algunas prendas mientras soltaba un quejido.

Me levanto igualmente del pelo y me aventó a la cama para después subirse arriba de mí tomando lugar en mi vientre bajo y me soltó un puñetazo en la mejilla derecha.

—¿Cuántas putas veces te tengo que decir qué no te escondas? No ganas nada. Al final te voy a encontrar. -dijo con furia y rencor en sus palabras, y después me soltó otro puñetazo del otro lado. A éste grado yo ya estaba llorando. —Y si no te encuentro ahorita, lo haré mañana y te daré lo que te mereces. -Se levanto de arriba de mí y me jaló del tobillo haciendo que cayera nuevamente al suelo. Sinceramente no sé porque me merezco esto, tal vez por imbécil. —No llores maricón de mierda, los hombres no lloran. -y me soltó una patada en el estómago.

Salio de la habitación dejandome tirado ahí. Con dificultad logre levantarme y me dirigí al baño. En un pedazo de espejo roto -el cual rompió Peter de un puñetazo en uno de sus ataques de ira- deslumbre mi rostro con dos hematomas nuevos y un labio roto.

Lloré con más fuerza para caer el suelo sintiendo que en algún momento se derrumbaría la casa y me caería enzima algún escombro, o al menos eso esperaba. Me senté en posición fetal, abrazando mis piernas dejando mi rostro en medio de mis rodillas y me desahogue en jadeos entrecortados y sollozos, pero mi paz duro poco.

Escuche pasos rápidos y pesados subir por las escaleras y pronto lo vi en el marco de la puerta del baño.

—Fui a la jodida cocina y no vi ninguna cena. ¿Dónde esta mi puta cena? -me pregunto notablemente enojado mientras apretaba sus dientes viendo como se tensaba su mandíbula.

—N-no creí que llegarías o que t-tendrías hambre. -le conteste entrecortadamente con lágrimas en mis Mejillas rojas por el esfuerzo.

—Una mierda. Ahorita mismo vas y me haces de cenar. -me tomo por el pelo nuevamente, a este grado me sorprendía no quedarme calvo o que no se me cayera el pelo a mechones, y me levanto dirigiéndome a las escaleras. Estaba usando mucha fuerza y me empujaba haciendo que a tropezones llegará a las ya mencionadas escaleras. —Y la quiero rápido. -me dio un empujón dándome a entender de que fuera a hacerlo pero para mi mala suerte resbale y caí.

Caí escaleras abajo.

∴✍∴
654 palabras.

Estoy corrigiendo, así que no se extrañen si les llega alguna notificación, ah.