✨ Capítulo único ✨

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Oh, la amaba.

Cada día cuando no le permitían estar a su lado se sentía solo. Por más que sus amigos estaban con él en las misiones o en su oficina, no era lo mismo que estar con la presencia de ella, dándole el amor que se merece. Las horas se volvían una eternidad y a cada momento no dejaba de ver su reloj para saber exactamente a qué hora podía volver a casa, donde su querida esposa lo estaba esperando despierta, como todas las noches.

Vaya que si la amaba.

El hombre más fuerte de la humanidad estaba casado y era de una mujer hermosa, que conoció un día cuando estaba de servicio al pueblo con sus demás compañeros, donde tan solo unas horas habían bastado para darse cuenta que ella era diferente al resto y terminar enamorándose. Aun recuerda cuando la chica le contaba toda su historia sobre como el titán colosal había destruido el distrito donde vivía y su familia adoptiva había terminado muerta, menos su hermano adoptivo llamado Eren. Mientras daba pequeñas mordidas a su pan, Levi se dedicaba a escuchar con atención cada detalle que relataba y disimuladamente observar cada aspecto físico de ella. En aquel entonces poseía una hermosa y larga cabellera color azabache, que actualmente estando casados se lo había cortado; también ojos tan profundos como la noche y un buen cuerpo que le gustaba cubrir con ropas demasiado tapadas para su gusto, pero eso no le quitaba el hecho que se veía hermosa.

Su nombre es Mikasa Ackerman, la mujer que había robado su corazón y lo sigue haciendo todos los días.

Como era posible que Levi, un soldado con un rango demasiado alto y que tenía su propio escuadrón, ¿estuviera casado con Mikasa?

Aquella mujer solo era ama de casa, no tenía un trabajo fijo, tan solo se dedicaba a hacer los quehaceres hasta que Levi llegara y así poder pasar unas pocas horas del día juntos. Con el dinero que su marido ganaba con su esfuerzo, ella compraba los alimentos y algunas cosas que eran necesarias para el hogar, pero casi no lo gastaba, ya que querían ahorrar para algún futuro no tan lejano.

Ellos se amaban, aunque ambos tengan personalidades muy idénticas y en algunas ocasiones "la bomba" tendría que explotar por su falta de paciencia entre ellos mismos, pero era algo normal en cada matrimonio, ¿no?

Mikasa intentaba ser la mejor esposa para Levi, desde el día que se casaron lo había prometido.

— ♥ —

— ¿Tanto demora en llegar? — Se quejó el novio, cruzándose de brazos y observando de mala gana a sus amigos que intentaban calmarlo.

— Siempre dicen que las novias se hacen esperar, ¿verdad? — Dijo Erwin, colocando una mano sobre el hombro de su amigo y sonriendo de una manera divertida.

— Mikasa de seguro tuvo problemas con el vestido. — Trato de explicar Eren, el hermano adoptivo que tanto Mikasa le había platicado y que para su suerte, tenía una buena relación con Levi, ya que ambos chicos ahora que iban a ser en cierta parte "familiares" tenían que llevarse bien y eso era lo que habían conseguido hasta el momento. — Espere un poco más, heichou.

— Te dije que no me llamaras así. — Le replico irritado, siempre sus compañeros le tenían que llamar por ese molesto seudónimo.

— Lo siento, es la costumbre.

Ya habían pasado varios minutos y la novia aún no se hacía presente en su propio compromiso, eso dejaba muy molesto a Levi, mientras los demás invitados, que consistían mayormente en los soldados de la legión de reconocimiento y los dos únicos amigos de la azabache, estaban esperando con ansias la llegada de Mikasa.

Marido & Mujer 【RivaMika】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora