The Musical Book

City Is Our • Logan Henderson.

Logan era el chico mas encantador de la escuela, su 1,75 metros de altura bien formados enloquecían a todas las chicas, formaba parte del equipo de fútbol soccer, era dueño de una de las sonrisas y miradas mas hermosas del colegio y una melena castaña oscura bien cuidada, probablemente el chico mas guapo de toda la ciudad. Todo mundo creía que Logan saldría con la mas hermosa del club de porristas, pero era todo lo contrario. El solo tenia ojos para una chica, seria esa chica que se la pasa escuchando musica mientras hace apurada la tarea de la siguiente clase que olvido tendría ese día, la que cantaría fuerte aun si no tiene la mejor voz, la que haría cosas que otros consideran ridículas pero que a ella le harían pasar un buen rato de diversión. Y eso era lo que Logan había visto en ella, era tan espontánea y divertida que la mayor de las veces salia de su rutina, y hacia que Logan saliera también.
Ellos dos se conocieron en la cancha de fútbol, ella estaba leyendo un libro para terminar su tarea y el estaría practicando, en un mal tiro el balón terminaría golpeando la cabeza de la chica y el la llevaría a la enfermería para verificar que todo estuviera en orden, desde ese día se llevarían de maravilla al punto de terminar siendo novios, y todas la envidiaban a ella por quedarse con el chico mas guapo.
Todos creerían que Logan seria el tipo de chico que llevaba a sus citas a algún restaurante costo, o que sería de los típicos chicos que daría regalos caros en su aniversario o cumpleaños, por que el antes era así. Y no es que no lo quisiera hacer, pero con ella era diferente, el pasaría a su casa algún sábado por la mañana en su auto y conduciría sin rumbo por toda la ciudad, para después pasar la noche en el primer hotel que se les cruzara por la carretera y al día siguiente pedir indicaciones de como volver. El en lugar de llevarla a algún restaurante caro ellos irían a comprar en algún restaurante de comida rápida y regresarían a casa de el para cenar en su jardín y después quedarse platicando de alguna cosa absurda mientras miraban el cielo. Ella era su pequeña escapatoria, por que mientras el estaba en la escuela era Logan Henderson, el capitán de fútbol soccer perfecto y sexy. Pero cuando estaba con ella corriendo por las calles gritando lo mucho que se amaban era un chico ordinario, solo era Logan, quien se había enamorado incondicionalmente de alguien cuya rutina era no tener una. El amaba todo de ella, el movimiento de su cabello con el aire, su risa, su sonrisa, la forma en que contaba anécdotas y se emocionaba, o cuando ella iba a apoyarlo en sus partidos con cara de confusión por que no entendía mucho el deporte, pero aun así ella estaba para el en todo momento. Le encantaba la forma en que ella lo abrazaba cuando el estaba cansado o estresado por alguna tarea o algún partido importante, ella llegaba y rodeaba su torso sobando su espalda con suavidad mientras hacía puntillas para que el pudiera recargar su cabeza sobre su hombro. Le encantaba la forma en que ella disfrutaba cada momento, cada minuto, con o sin el, ella disfrutaba tanto de la vida y contagiaba su alegría, y aunque quizá solo fuera una chica mas ante los ojos de los demás, para el era su pequeño rayo de sol. Estaba enamorado de ella, y ella de el. Y siempre sería así, siempre estarían juntos, siempre harían las cosas mas locas, ambos estarían atrapados en su burbuja y harían de la ciudad solo de ellos.