Hey Luke, I love you!» muke

Epílogo

3 años después.

Luke tenía un brazo alrededor de la cintura de Michael, mientras que el ojiverde dormía plácidamente sobre su pecho desnudo.
Sus dedos acariciaban la suave y cálida piel de la cintura de su novio.

Michael empezó a removerse, sintiendo la mirada de Luke sobre él.

Arrugó su pequeña y redonda nariz cuando Luke la tocó con su dedo índice. Abrió los ojos, encontrándose con los hermosos ojos azules del rubio, quien lo miraba sonriente.

— Buenos días, amor.— saludó Luke, acercándose a Michael y dejando un pico sobre sus labios.

El teñido sonrió aún adormilado.
— Buenos días, cariño.— dijo de vuelta, con su voz ronca.— ¿Qué hora es?

—Son las nueve.— mordió su labio, viendo al pelinegro.— Sabes lo que me provoca cuando hablas con la voz ronca, Michael.— Luke lo miró lascivamente, sonriendo de lado.

Michael río: — Cállate Luke.— susurró escondiendo su cara en el cuello de Luke para que no notara su sonrojo.

— Oh, amo cuando te pones como un tomate, amor.— continuó el rubio, haciendo que las mejillas de Michael ardieran.— No te ocultes.— reprochó.— Harás que siga diciendo lo hermoso que te ves.— dijo bromeando— ¿Ya dije que luces como un pequeño gatito? Tienes una nariz adorable.

— ¡Que te calles, Luke!— gritó, apenas distinguiéndose al tener la cara contra la almohada. Escuchó la risa de su novio. Michael lo miró con cariño.

Luke giró en la cama matrimonial que compartían desde hace un año, dejando a Michael debajo de él. Se acercó, como si fuera a besarlo, pero en último momento dirigió su boca a su oído.

— No me pedías eso ayer, gatito.— el susurro ronco del rubio le provocó un escalofrío por todo el cuerpo. Jadeó cuando su novio chupó el lóbulo de su oreja.

— P-para Luk-ke.— pidió, conteniendo un gemido. Luke besó su cuello y succionó un poco.— Es en serio, idiota, vamos a llegar tarde con mi mamá.

El rubio bufó:— Bien. Voy a ducharme.— Luke sonrió de lado nuevamente, observando al ojiverde.— ¿No quieres acompañarme?

— ¿Y arriesgarme a que me seduzcas? No gracias.— contestó el rubio.

— Ya te seduje hace mucho, amor.— guiñó.

[...]

Una hora más tarde, ambos chicos estaban listos para ir a visitar a los padres de Michael.

Subieron al auto que entre los dos compraron.

— ¿Cuáles son los planes de hoy, Luke?— preguntó Michael, feliz. Hoy era su tercer aniversario.

— Después de desayunar podríamos ir al centro comercial y luego al parque.— propuso el rubio, ninguno había preparado algo realmente para ese día, pero estaba bien para ellos.

El ojiazul sonrió. Estos tres años juntos no habían sido fáciles. Michael era muy celoso al igual que Luke, y tenían constantes peleas por ello, pero se amaban demasiado. Después de dos años de relación, habían decidido mudarse juntos a un pequeño departamento.
Aún mantenían contacto con Calum y Ashton.

Llegaron a la casa de los Clifford y bajaron rápidamente, pues ya iban un poco tarde para el desayuno. Tocaron el timbre y esperaron a que Karen abriera.

— Hola Michael. Hola Luke.— saludó, abrazando a la pareja.— Pasen al comedor, Daryl ya está ahí.

— Te ayudo, Karen.— se ofreció Luke, la madre de su novio asintió.— Ve al comedor, amor.— besó su frente cariñosamente.