ASESINO Y AGUJAS

CAPÍTULO 49- Las rosas lloran tu ausencia

Afrodita se sentía dolido,por la actitud de Shun, igual que Aioria,por el abandono de Ikky. Afrodita había dejado casi completamente a un lado su ira y su violencia,sus manos,ahora,solo se crispaban,cuando contenía el llanto,el enojo,o la pena:se sintió un ruido metálico sobre ese suelo ,y Afrodita sonrió levemente,secándose las lágrimas._ Espero que lo haya disfrutado.No soy quién,para pedirle cuentas de nada,ni exigir nada de usted,pero...me ha estado haciendo falta,y no sé si le importe,pero estoy felíz,de que haya vuelto.Shun lo besó._Aioria debería estar contento  también,mi hermano volvió con él.Afrodita lo notó triste._Lo lamento,de verdad lamento oir eso.Shun se encogió de hombros._Supongo que ya era tiempo.Al contrario que a otros,a tí,te he visto beber un par de veces.¿Si prometo no embriagarme,beberás conmigo.Afrodita le arrojó una lata.-Bebamos,entonces.Supongo que habrá notado también que Siegfried y los demás lo hacían.Es el clima.Te obliga a buscar calor en la bebida,y la comida.Aunque uno de esos niños...Bud,creo...casi acaba muerto,y todo por una estúpida ley.La vida,a veces,apesta.Mire a Albafica,o Lugonis:enfermos a más no poder,pero corazón y mente limpias, y yo,sano a más no poder,y completamente podrído por dentro.Shun sintió el aroma de las rosas rojas y blancas._¿Has vuelto a hacer de las tuyas.Afrodita negó.-No podría:desde aquella vez,renuncié para-siempre,a aquello,pero,-si también debo renunciar a cultivarlas-,estoy más que dispuesto a hacerlo.Shun,quitándose su ropa,sonrió._No renuncies:aparte de tí,tal vez sea lo único bello que hay por aquí.