The Beast Inside (Chanbaek/Baekyeol)

Capítulo 4

Si Chanyeol pensaba que no volvería a ver a Baekhyun hasta el viernes, estaba ciertamente equivocado. El lobo se presentó allí el martes a la misma hora, sorprendiéndolo y molestando de nuevo a Sehun. Esta vez llevaba comida para ambos, obviando a Sehun en sus planes nuevamente y haciendo que éste, con un mohín de desprecio, los abandonara tras la petición de Chanyeol de dejarlos a solas. El alto sabía que después le esperaba una charla con su amigo, y la verdad era que no tenía ganas.

- ¿Lo hiciste a propósito para molestar a Sehun o simplemente eres así de maleducado? -le preguntó ya en el jardín de la facultad, sentados bajo un árbol para protegerse del sol que había comenzado a calentar con fuerza. Baekhyun disparó sus ojos oscuros hacia él y sonrió de medio lado.

Chanyeol odiaba que se viera tan atractivo cuando hacía eso.

- Por más que me guste la cara de dignidad que pone tu amigo cuando le pides que nos deje a solas, simplemente quería traerte la comida.

- ¿Y para qué exactamente? -volvió a indagar, aunque aceptó la fiambrera con arroz salteado que le pasó el mayor.

- Quiero cortejarte, pollito -le sonrió el lobo mientras abría su propia fiambrera y le pasaba los cubiertos-. Que aproveche.

Cortejarlo. Chanyeol sabe que no rió por el uso de aquella palabra simplemente por educación, y aunque el término se le hacía arcaico y en desuso, no puede tampoco negar que le hizo ilusión porque, joder, pensaba que el tipo sólo quería follárselo y sin embargo, se había tomado la molestia de hacerle la comida y llevársela a clase. No quería hacerse ilusiones, realmente no quería, pero no podía evitarlo.

Chanyeol no había tenido muchas relaciones. Su falta de seguridad en sí mismo y su timidez lo hacían ser reservado y cohibido, a pesar de que muchas personas le gustaron, jamás tuvo valor para decírselo a alguna de ellas. De hecho, tan sólo había tenido una relación estable con una chica que se le declaró, una compañera de clase en el instituto bajita y adorable con la que había terminado seis meses más tarde de mutuo acuerdo porque sabía que, aunque ella lo quería, era simplemente como un buen amigo para ella, pero no realmente un novio. Chanyeol lo supo el día que la vio hablando con Kim Jongin de la clase contigua y vio cómo le brillaban los ojos hablando con él, un brillo que no tenía cuando ellos dos estaban juntos. Chanyeol no la culpó, ¿quién no preferiría a Kim Jongin antes que a él?, pero eso no evitó que le doliera.

Después de eso, Chanyeol había evitado tener más contacto del deseado con otras personas, rechazando de plano tener otra pareja pero más aún relaciones esporádicas. Tan sólo había besado a un chico en su primera fiesta en la universidad, pero aparte de eso, habían pasado cinco años sin que Chanyeol tuviera algún tipo de contacto íntimo, era tanto tiempo que hasta Sehun decía que su virginidad se restauraría por sí sola o alguna chorrada por el estilo. A Chanyeol no le importaba no tener sexo o compartir besos, vivía bien así. O al menos, así había sido hasta el viernes anterior.

Había acabado aceptando ir al Two Moons ante la insistencia de su madre, realmente, que Sehun apareciera allí simplemente había sido casualidad, pero lo que no se esperaba era volver al hombre de aquella mañana, mucho menos dejarse enredar y llevar a casa ajena en cuestión de minutos, donde casi, casi acaba acostándose con el tipo.

Aquello le había supuesto que su autoestima subiera, no iba a negar que el deseo que pudo ver en los ojos del lobo lo había encendido y excitado, más aún sabiendo que él era el responsable de que el mayor perdiera el control de alguna forma. Sin embargo, al encenderse las luces de la habitación donde lo había llevado, sus inseguridades volvieron y se asustó, prefiriendo entonces irse para no tener que enfrentarse luego a la decepción en los ojos del mayor cuando viera que Chanyeol no era lo que esperaba.