El insomnio no me dejaba en paz, abri la cortina y el cuarto se iluminó lentamente, miro por la ventana y me maravillo con este hermoso paisaje, una oscuridad iluminada tenuemente por un sol no nacido que aún no decide si amanecer o no, con vergüenza de mostrar su belleza... algo que no se ve todos los días, un paisaje observado únicamente por estos ojos agotados que añoran el poder soñar pero que aún viven deleitados por la realidad que se ve a través del Vidrio... el sol comienza a dejar ver sus primeros Rayos del día, a veces es lindo no dormir y no perderse esta realidad que supera cualquier sueño.
23/06/15
