Fiesta Anual del progenitor

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...¿Hola?¡No, con la escoba no!

Así que con este capítulo, necesito más que nunca que comenten como me quedó, porque estoy algo nerviosa. Yo escribo esto mucho antes de saber de que tratará el capítulo. Ya, dejándome de lloriqueos, que comience el capítulo.

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El interior del lugar era incluso más sublime que el exterior, el color blanco predominaba lo cual daba una sensación de pulcredad y órden. En el techo colgaban pequeñas lucecitas redondas y doradas que se prendían y apagaban,había estatuas de hielo, arreglos florales y las mesas eran largas y muy ordenas, con sus respectivos adornos en cada una, que consistía en velas, flores y bonsais de hielo. Había cuadros,incluso una chimenea con sillones en las que los vampiros se sentaban para hablar entre sí, los mozos eran muchos y todos cubrían su cara con un antífaz, vaya a saber por que.

-Por aquí señores, por favor-los guió el vampiro que los había recibido en la entrada.

Ferid, Crowley, Chess, Horn, Krul y Mika lo siguieron hasta el anfitrión de la fiesta: Urd Geales, el Segundo Progenitor y gobernante de Rusia.

-Bienvenidos, Progenitores. Krul Tepes-los saludó Urd fríamente.

-Muchas gracias, Urd-sama-dijo Ferid.

Todos los demás, menos Krul se inclinaron, incluso Mika, más por simple protocolo que por respeto de verdad.

-Saludos, Urd-dijo finalmente la reina.

-Seán libres de disfrutar de la fiesta. Nos vemos-se despidió él y se retiró.

Había mesas repletas de comida humana, casi no parecía una fiesta para los vampiros, al parecer,estos se daban el gusto de degustar los platos humanos a pesar de que no los nutría realmente.

-¡Mire Crowley-sama!¡Hay incluso una fuente de chocolate~!-exclamó Chess emocionada tomándo al mencionado vampiro por un brazo y mostrándole con su dedo índice la fuente.-¡Vayamos~!-Chess se lanzó a la fuente e introdujo una copa en el chocolate y bebió apresuradamente, manchándose un poco de su vestido azúl oscuro de fiesta.-¡Delicioso~!

-Compórtate mejor, Chess, estamos en una fiesta importante-le dijo Horn, avergonzada por la conducta de su compañera, quien sólo le sacó la lengua como protesta.

-¡Eres demasiado estirada, Horn!-contestó enojada-¡También hay pollo aquí~!-arrancó una pata del animal con las manos enguantadas y lo devoró con ansias-¡Comef efto, Horfn, ef delifiofo!¡Ufted tamfién, Crowlef-fama!

-No hables con la boca llena, estás ensuciándote-suspiró su compañera, tomándo un plato y sirviéndose el ave con los cubiertos. A continuación, se sentó y con la espalda bien derecha comenzó a comer tranquilamente.

-¡Que aburrida eres!-le respondió Chess cuando tragó. Mojó sus dedos en el chocolate y agitó su mano para arrojar el líquido sobre la mejilla de Horn-¡Mi~ra~, ahora tu también estás sucia!

Horn suspiró molesta y tomó una servilleta para limpiarse, pero antes de hacerlo, Crowley frenó su mano y pasó su lengua lentamente por el chocolate de la mejilla de ella, sonrojándola. Chess los miró molesta y a continuación paso su mano sucia por su cara.

-¡Mire Crowley-sama!¡Yo también estoy sucia~!

-¡Jajaja!-se rió el vampiro.

-Eso es algo que has provocado tu, en cambio yo me ensucié por tu culpa. Límpiate sola.

-¡Es injusto~!¡Es injusto~!¡Crowley-sama, ayúdeme por favor!

-Ya, ya-la tranquilizó él pasándole una servilleta por la cara.

Mi ReinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora