Antes de empezar quiero decir que eh buscado en otros imaginas haber si había algunos de Howard y casi no hay. Y como él es uno de mis favoritos subiré unos cuantos aquí.
Y se que hay algunas que igual les gusta Howard y caso no hayan nada.
Chicas, aquí es su lugar♡
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Estabas como en un centro de combenciones o como una feria. Fuiste sola porque un chico te había dejado plantada un tal Sebástian.
Estuviste casi 1 hora y no es broma, te artaste y mejor te fuiste a ver una exhibición de un auto del "futuro" por Howard Stark. Sus inventos son muy extraordinarios pero él es muy mujeriego y todo eso, y además te caía mal.
Tu solo ponías atención a al carro que poco a poco empezaba a volar pero al último falló. Y también al beso que le dió a una de sus ayudantes.
Pronto todos se iban de ahí y tu por instinto quisiste ir de nuevo al lugar por si tu cita había llegado pero de nuevo no había nadie.
-¿Cómo fuí tan idiota? - Te dijiste a ti misma - ¿ahora que hago?
No querías ir a casa porque seguramente tu mamá estaría con una pareja, ya que tu papá se alistó para la guerra y no lo has vuelto a ver.
Y da la casualidad de que tu ex cita era también comandante o teniente, no le pusiste atención porque te aburría todo eso, pero no ibas a perder la oportunidad con él pero alparecer era un mujeriego de primera.
-Mmm iré por unas palomitas y haber que encuentro .- Pensaste.
Fuiste por esas papitas y viste el carro del señor.Stark.
-¿Qué te parece? - Escuchaste la voz de un hombre. Tenías solamente 1 opción: Sebastián; Pero esa voz era diferente.
-No me gustaría darte alas, pero es genial.
-Howard empezó a reír - Una linda señorita como tú, ¿qué hace a estas horas sola?
-Tenía una cita pero un chico me dejó plantada así que.....- dijiste mientras analizabas el coche.
-Y cómo es que pudo hacer eso? Digo, eres hermosa.
-No me creo nada de lo que dices.
-¿Por qué?
-Fácil. Eres Howard Stark, hay muchas mujeres detrás de ti.
No te contestó, sólo se te quedó viendo.
Quedaron unos minutos en silencio hasta que por fin hablaste.
-Bueno, tengo que irme.
-¿Ya?
-Sí, es algo tarde y tengo que irme caminando.
-¿Qué te parece si vamos por una copa y después yo te llevo a tu casa?
-No, no lo sé.
-Eso es un sí.
Te tomó de la cintura y te llevó a un bar que estaba cerca.
-¿Qué quieres tomar?
-No tomo alcohol.
-Oh vaya!
-Sí, aja.
Y bueno, te la habías pasado increíble. Al final si tomaste unas copas pero estabas perfectamente conciente de lo que hacías.
Eran casi las 3:00 de la mañana cuando decidieron irse.
-¿Donde vives ____?
-¿Puedo quedarme en tu casa?
-Ehh.
-Oh, lo siento. ¿eres casado?
-Mmm no. No. Claro si puedes.
-Esta bien.
Su casa era algo grande, sí que lo era. Aún no tenías sueño ni nada de preocupaciones ya que tu mamá no te preguntaba nada.
-Que bonita casa...
-¿verdad que sí?
Lo único que hiciste fue voltear tus ojos, aún así con esa actitud podías jurar que ya te estaba empezando a gustar. Aunque sacabas esos pensamientos de tu cabeza ya que era poco probable que alguien como él se enamorara de ti.
Y aún sabiendo que un soldado guapisimo te había dejado plantada también.
-Y este es mi cuarto.
-Wow! Que cómodo. - Al ver su cama te lanzaste. Era tan cómoda.
-Howard
-¿Si?
-¿Sales con alguien?
-Claro que no, nena.
Tenías 2 opciones. 1.- Hacerlo esa noche.
2.- O quedarme dormida.
