Do Kyung Soo

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Una luz aún más potente que la del foco de la calle daba directamente en la cara del muchacho, traspasaba directamente la separación entre la madera de la vieja cabaña y perturbó el sueño del joven hasta el punto de hacerlo despertar. Cuando abrió sus ojos y recuperó los sentidos, escuchó el sonido que hacer las llantas de un automóvil al avanzar sobre el asfalto, seguramente los focos delanteros del automóvil se habían colado por la rendija, era su oportunidad, se encontraba solo y si tenía suerte quien quiera que se encontrara afuera quizás podría escucharlo.

- ¡¡Ayuda!! ¡¡¿¿Me oyen??!! - intentó arrastrar la silla a la cual se encontraba atado un poco más hacia el agujero, pero solo avanzó escasos centímetros - ¡¡Necesito ayuda!! Por fav... - recibió un golpe seco en el abdomen que inmediatamente le quitó el aliento, cuando al fin pudo dar una bocanada de aire respiró con dificultad y comenzó a toser sin poder articular palabra alguna.

- Me voy diez putos minutos ¡¡y ya intentas escaparte mocoso!! - dio un grito que más bien sonaba como un susurro - por tu bien guarda silencio, estás comenzando a agotar mi paciencia- el hombre había entrado sin previo aviso y había golpeado al chico, no podían ser descubiertos... no todavía.

El secuestrador se acercó hasta la separación entre las maderas y trató de observar quién se encontraba en el automóvil mientras el joven seguía tosiendo. Se alegró al darse cuenta que solo venían a tirar algo de basura y pronto se habían marchado. Volteó a ver al adolorido muchacho y retomó su posición en la silla frente a él.

- No me gusta que desobedezcan mis ordenes.

- Guardaré silencio.

- Así me gusta mocoso... deberías haberte comportado así desde un principio.

- ¿Por qué haces esto?.. al menos me gustaría saber eso antes de morir - intentó mantenerlo ocupado para alargar aunque sea unos minutos su lamentable vida.

- No intentes ganar tiempo - se dibujó una sonrisa en su rostro - De todas maneras no intentaré matarte todavía, aún quiero contarte la historia completa... y con respecto a tu pregunta, quizás antes de quitarte la vida te la responda.






Con la muerte de Hoseok las dudas seguían creciendo, ¿Por qué el asesino estaba matando a los muchachos? ¿que buscaba en los jóvenes? y lo más importante, ¿Quién era?

Los muchachos ni si quiera pudieron presentarse en el funeral de Hoseok, tenían resguardo policial y debido a que de parte de la policía de investigaciones habían afirmado que el asesino podía pertenecer al circulo cercano, cada uno debió volver a sus respectivos hogares.

Era una tontería, jamás en la vida alguno de los muchachos sería capaz de asesinar a alguien, ni si quiera a un desconocido, menos lo harían a alguien a quien consideraba sus hermanos. Le hicieron saber a la policía que era una tontería, por lo que intentaron buscar más pistas.

La lista de sospechosos comenzaba a aumentar, datos que parecían ser irrelevantes pronto se transformaron en pistas claves y de esta forma, nuevamente los interrogatorios formaron parte del día a día, comenzando con Yoongi.

- Dime, ¿piensas en algún posible sospechoso?, cualquier cosa podría ser de ayuda - explicó el detective a cargo del caso.

- Yo... bueno, la verdad si se me viene a la cabeza alguien - entrelazó sus dedos mientras apoyaba sus manos en la mesa de la sala de interrogatorio - Cuando aún estaba en la secundaria había un muchacho al cual siempre molestaban, ya sabe, los típicos mocosos que se quieren pasar de listos en la escuela... ¿está seguro de que esto servirá? 

Por Nosotros | BTSWhere stories live. Discover now