El Chico De Los Ojos Verdes

Día 16 "La pérdida"

¡Oh por dios!, esto no puede estar pasando rayos.
He estado toda la mañana buscando el maldito cuaderno donde le escribo a Mikel, mi habitación esta de cabeza, ya busque hasta por debajo de las piedras y no puedo encontrarlo.

-Angeline ¡¿Que pasa contigo llegaras tarde?!- Grita mi madre desde abajo y yo resoplo.

-¡Ya voy mamá!- Gritó y tomó mi mochila, bajo las escaleras a toda prisa y salgo sin despedirme.
Quizá este en mi casillero y lo he olvidado.

-Hey An, ¿Porque tanta prisa?- Dice Dayanne mientras camina para acercarse a mi lado.

- No, por nada solo camino como siempre- Digo subiendo las escaleras de la escuela y entrando a toda prisa, corro hasta mi casillero y lo abro rápidamente.

-¡Demonios aquí tampoco está!-
Revuelvo todas las cosas y algunas se me caen pero me da lo mismo necesito encontrar ese cuaderno y pronto.

-An, ¿Que buscas, esta todo bien?-
Me sobresalta Tyler a mis espaldas y yo giro para encontrar a mis dos amigos con el ceño fruncido y mirándome fijamente.

-Deacuerdo...-Suspiro-Lo que sucede es que no encuentro la agenda que me obsequiaste y tengo cosas importantes ahí- Digo bajando el tono de voz y me doy la vuelta para acomodar un poco mis cosas de vuelta al casillero, mi habitación tendrá que esperar.

-An, mira quien viene hacia aca- Dice Tyler discretamente y yo volteo muy despacio con miedo de que sea el profesor de historia ya que no he terminado mi ensayo pero lo que me encuentro es algo peor, Mikel viene hacia acá con dos de sus amigos.

-¿Puede empeorar este día?-
Digo mientras pasas por un lado mio y sonríes ampliamente con sus perfectos dientes, me miró en la pantalla de mi teléfono y veo que estoy hecha un desastre ¡me veo horrible!, cabello despeinado, ropa torcida y una apariencia en general desastrosa.

-Ven, es mejor que entremos a clase, te ayudaremos más tarde a buscarla- Dice Dayanne llevándome del brazo hacia nuestra clase que para variar es historia, la vida me odia.

Después de la escuela los tres salimos a toda prisa directo a mi casa para seguir buscando.

-¡Diablos, te dije que no estaba aquí!- Digo mientras me dejo caer en el montón de ropa que quedo en el suelo de mi habitación, realmente soy muy muy idiota,  ¡¿Cómo pude perderlo?!

-Tranqulia An, ya verás que aparecerá- Dice Ty poniendo una mano en mi hombro y sentándose junto a mi.

- El tiene razón, debe est.. Disculpen- El celular de Dayanne comenzó a sonar con su peculiar tono de un pato y salio de la habitación para atender.

- Si mamá... pero el tiene hongos... dios santo... deacuerdo pasare por la mantequilla, adiós- Entra Dayanne con una cara de pocos amigos y comienza a guardar sus cosas en el bolso.

-¿Está todo bien?- Preguntamos al unísono Tyler y yo y miramos expectantes a Dayanne.

- Si, es solo que mi tonto primo se quedará unos días en casa y le darán mi habitación pero el tiene hongos en los pies, ¡Es tan asqueroso!- Dice y sale de mi habitación, momentos después escucho la puerta de la entrada abrir y cerra y después silencio.

-Bien chica, también debo irme te veré mañana tu tranqulia- Dice Ty levantándose del suelo y saliendo de mi habitación, me quedo un rato ahí tumbada hasta que comienzo a sentir mis párpados  pesados y finalmente me quedo dormida.