¿Y si te dijera que...?

13 0 0
                                    

3 semanas después

Kayla

- Joder chicas ¡él es un maldito infeliz! No importa si encuentra mil excusas a su pinche conducta, ¡es un hijo de puta y no hay nada que discutir! - digo gritándole a Hanna y Cassie en la cara mientras ellas me miran asustadas.

- Okay Kayla, respira, cálmate y pronto llegará Cody, así podrás desahogarte pero por ahora no digas nada querida - Hanna se acerca a mi en forma maternal y me abraza, al incio me resisto, pero sin darme cuenta tengo la cara llena de lágrimas y mi visión es borrosa.

Parezco una niña pequeña en serio...

Tocan la puerta y Cassie atiende, entran a mi cuarto y traen helado, una caja de zapatos y un pequeño cojín feo.

- Oye Kay, ¿escúchame si? Entiendo que te duela tanto y tiene sentido, sólo trata de estar tranquila y tiraremos cada cosa que tienes aquí de él, cada recuerdo y cada parte de él se irá a donde tú quieras... por favor, eres tan linda y nos gusta verte con una sonrisa, no llorando pequeña - Cody se acerca y me da un fuerte abrazo, pero yo sigo llorando desolada.

Recuerdo cuando Peter me abrazaba, si estaba llorando él podía calmarme y podía hacerme reír de nuevo, quién diría que ese "gran" chico se convertiría en mi peor pesadilla.

Sólo han pasado 3 horas desde aquella conversación, pero para mi ha sido una eternidad mientras repito palabra por palabra lo que dijimos, pero ¿por qué me sorprende tanto? Yo llevaba dos meses sintiendo que nuestra relación ya no era igual y siempre creí sus estúpidas mentiras sobre sus "problemas" con sus amigos.

Yo fui tonta, yo quise creer en él, yo fui quién lo amo tanto y ahora no sé cómo curar ni sanar mi corazón...

FLASBACK

Kayla

Estoy en el parque caminando con Jack y Nicole, vamos hacia una cafetería para terminar el proyecto y de pronto veo a Peter con ropa de gimnasio en el otro lado del parque... ¿qué no dijo que estaba enfermo?

Anoche lo invité a comer hoy y dijo que tenía gripe, que ni siquiera iría a la escuela pero ahora me lo encuentro muy sano y entretenido ¿qué pasa con él?

- Chicos, vuelvo en un momento necesito ir... a re-e-evisar unas cosas... - apenas y logro pronunciar para dirigirme con Peter mientras Jack y Nicole van hacia la otra dirección.

Mientras camino comienzo a sentirme mareada, no sé por qué tengo ese presentimiento de que ésto saldrá mal...

- Wow ¿ahora estar enfermo es ir al gym y mentirle a tu novia? - llego por detrás de él, en cuanto me escucha se gira hacia mí y abre sus ojos como platos.

- Kayla... ¿q-q-qué haces a-aquí? - me señala y se ve realmente nervioso - dijiste que tenías un proyecto ¿no? -

- Si, vine a hacerlo pero resulta que te encontré aquí - digo cruzando mis brazos - Oye y que bien se escucha tu voz, para "tener gripa" - suspiro y él busca palabras para explicarse.

- No es lo que crees, en-en serio no es lo que parece - se acerca para intentar abrazarme pero lo empujo y lo fulmino con la mirada.

- Mira Peter me vale madre si quieres tratar de convencerme, sabes cuánto odio que me mientas y ahora no tengo tiempo para escucharte, aunque siendo honestos, no quiero escucharte, adiós - me doy la vuelta y camino en dirección contraria hacia donde él está.

- ¡Espera! ¿Eso qué significa? - grita corriendo hacia mí, alcanzándome.

- ¡Suena justo a lo que crees! ¡Ya suéltame! -

Comienzo a correr alejándome de él, cruzo una avenida y en eso cambia el semáforo, Peter se queda del otro lado y yo sigo corriendo hasta una parada detrás del parque. Intento recuperar el aliento y es cuando descubro que estoy llorando, pero no me di cuenta antes.

Le marco a Nicole para decirle que haré mi parte del proyecto en casa y decido ir andando, así podré despejar mi mente un rato. 

[...]

Mis papás no están en casa, así que preparo algo de comer y cuando ya voy camino a mi cuarto, suena el timbre.

- Necesitamos hablar Kayla - ese tono en su voz, suena tan inquietante...

- ¿Qué quieres? - digo aún molesta y ahora él no intenta calmarme.

- Lo sé, te mentí pero fue porque... Kayla necesito espacio, además si íbamos a comer tendría que usar el dinero de mis ahorros y odio hacerlo... -

- ¿Disculpa? ¡¿Y de dónde mierda crees que saco el dinero que gasto contigo?! ¡¿ O por qué vienes reclamando espacio si últimamente sólo salimos cuando quieres?! ¡Siempre te quejas por todo y pones condiciones para cualquier detalle! ¡Tú eres el que.... - me interrumpe pero esta vez no me enojo, no, sólo siento como si me dieran una bofetada, aunque duele más que una bofetada física.

- Es que de eso quiero hablar, ya no me siento bien contigo, Kayla creo que deberíamos terminar... - 



Aprendiendo a Odiarte Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora