Capitulo 1

2.7K 225 24
                                    

Afín a mi signo del zodiaco

Y con tu futuro ya resuelto

Nunca bebes y odias el tabaco

Tú debes de ser un gran prospecto

El otoño se llevó tu pelo

Y escondes la panza bajo el saco

Es cierto que no eres un modelo

Pero me derrites con tu trato

Dudo como un pez frente al anzuelo

De una vez te tomo o te dejo

Estúpidas revistas de chicas, gracias a ellas, ahora creo un montón de tonterías sobre signos zodiacales, aunque, a pesar de todo, las revistas siempre marcan que nuestros signos son compatibles, malditas chicas y sus estupideces. El jamás estaría con alguien como yo, para empezar, es un hombre adulto, un importante profesor de ciencias en la universidad, que haría alguien como él, enredándose con un simple muchacho, soy quince años más joven que él, podría incluso ser mi padre. Las veces que nos hemos visto en algún bar discreto, no bebe, de hecho, odia el alcohol, pues su padre era alcohólico, no fuma, el olor del cigarro le parece nauseabundo, en cambio yo, bebo y fumo demasiado, bebo cada que tengo oportunidad, y podría fumar hasta dos cajetillas de cigarrillos al día, somos tan diferentes, sin embargo, nos llevamos de maravilla.

Todas las personas en este mundo esperarían que sus hijas se casaran con alguien como él, o que sus hijos se convirtieran casi en su reflejo, los años han hecho que unas ligeras entradas comiencen a notarse en su cabeza, así como una cuantas arrugas no muy marcadas, su estómago, ligeramente abultado, se oculta bajo sus sacos, esos que adora usar cuando el clima es frio, es, normal, no es un adonis o un modelo de revista, pero, tampoco es feo, sin embargo, para mí, es el hombre más hermoso de todos, lo que más amo de él, es, sin duda alguna, la manera tan dulce en la que me trata, hablándome con cariño y dulzura, como si fuera la cosa más maravillosa del universo, su universo.

Me asusta, una relación entre nosotros, sería casi imposible, dudo, desde la primera vez que lo vi, y aun más desde que lo conocí, no sé, tomarlo solo para mí, o, dejarlo ir con quien pueda mantenerlo a su lado, todo es tan complicado que pareciera que fuera de vida o muerte.

Eres casi el hombre perfecto

El que busque por tanto tiempo

El que me hace vibrar la piel y el esqueleto

Las noches con el son infinitas, pero cortas, recuerdo la primera vez que pasamos la noche juntos, sus manos recorrían mi cuerpo suavemente, como si temiera romperme, como si con el mínimo roce fuese a esfumarme, nos desnudamos lentamente, entre caricias dulces y suaves, con besos repartidos por todos nuestros cuerpos, sus expertas manos recorrían mi cuerpo dándome el mayor placer que jamás hubiera sentido, hicimos el amor tan suavemente que apenas hubo dolor, demostrando con cada caricia que era, sin duda, el hombre con el que me gustaría pasar el resto de mi vida.

Eres casi el hombre perfecto

El que yo me imagine en mis sueños

De los que rara vez se pueden ver

Debiste nacer en año bisiesto

Es casi perfecto, tan maravilloso que parece sacado de uno de mis más íntimos sueños, su sola persona es tan irreal, tan, magníficamente imperfecta, tanto, que no pareciera posible, si eso de que la gente única nace en año bisiesto, el, sin duda alguna debió haber nacido durante uno, es esa clase de hombre, de caballero, de esos que rescatan princesas, de esos que casi nadie logra conocer.

No me deslumbro tu convertible

Como tu porte de caballero

La primera vez que lo vi, llegaba a la universidad, en un ostentoso coche, un precioso deportivo negro, sin embargo, su rostro, su actitud al caminar y el cómo me saludo con un –Buenos días- dándome la sonrisa más brillante que jamás haya visto para luego, abrirme la puerta de la universidad, dejándome pasar a mi primero.

Si bien el dinero a veces sirve

Es tu amor lo único que quiero

A muchas personas les hubiera agradado por la exuberante cantidad de dinero que guardaba en el banco, sin embargo a mí, a mí lo único que me importaba es que hablara de mí, que pronunciara mi nombre con un amor infinito y único.

Todo un cuarentón con privilegios

Me presumes frente a tus amigos

A pesar de que rondara entre los cuarentaicinco, su rostro no demostraba más haya de unos treinta y tantos, sin duda, contaba con el privilegio de ser un perfecto traga años. Me presumía a sus amigos, no como el chico que llenaba sus vacíos, si no como, el estudiante perfecto, dedicado, responsable e inteligente, no tenían ni idea de lo que en realidad pasaba.

Te gustan los niños y los juegos

Eres el ejemplo de marido

Recuerdo haberlo visto en el parque en una ocasión, corriendo y jugando con un par de niños idénticos a él, más atrás una mujer los observaba enternecida, el jamás noto que estaba ahí, pero sin duda, sería el padre perfecto, cariñoso y atento, y aún más el esposo de cuento, ese que cualquiera desea, siempre procurando el bien estar de su pareja, derrochando amor por cada uno de sus poros, de esos que cuando cometen un error suplican por perdón, eso me lastimo, me hizo sentir como lo que fui en su vida, un error.

Tú serias un hombre perfecto

Si no fuera que tienes un secreto

Sin duda alguna, el hombre perfecto, pero, maldita sea, nadie es perfecto, ni siquiera el con todas sus virtudes y cosas lindas, si no fuera por ese maldito secreto, la vida sería distinta para mí; no estaría sufriendo por estas malditas estupideces del amor, pero nadie escoge a quien amar y yo tampoco lo hice.

Tú serias el hombre perfecto

Pero solo tienes un defecto que no eres soltero

Perfecto solo para mí, sin duda, malditos secretos y malditos obstáculos, en este caso, una persona es la que se interpone entre nosotros, una mujer de hecho, la perfecta profesora Betty Ross, la flamante esposa del hombre al que amo, me enamore de un hombre fantástico, dulce y amoroso, a pesar de que jamás ocupare el lugar de su compañero eterno, pues ese lugar ya está ocupado, yo, yo solo me conformare con quedarme con un pedacito de él, no arruinaría una familia tan hermosa como es la suya, porque, a pesar del dolor que me causa admitirlo, ellos forman una pareja hermosa, una familia tan perfecta como el, tomare mis cosas, me iré lejos, mi carrera está casi finalizada, terminar y conseguir trabajo no será difícil, lo difícil será olvidar, olvidar todo lo que he pasado en esta maravillosa ciudad, el hombre al que ame y comenzar de nuevo, esta vez con algo que me recuerde lo mucho que se puede llegar a amar a alguien...

CASI EL HOMBRE PERFECTO (Hulkeye)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora