Capitulo 5: ¡Sácame de aquí ahora!

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Leonardo Smith:

Niego con la cabeza y camino hacia ella, para rodear su cadera con mis brazos. Deposito un beso cálido sobre su mejilla y noto como da un salto.

-¡Me asustaste! - Se queja.

-Lo siento preciosa. - Le digo y su cara comienza a ponerse roja.

Después de unos segundos caminando me da un apretón con su mano y entonces me dispongo a mirarla.

-Yo también lo siento. - Me responde cabizbaja.

-¿Por?

-Por ponerme así...Sólo es una fan y yo no pude simplemente evitarlo.

-¿Tus celos? - Le digo con una risita.

-Sí y los tuyos también. -Me pincha.

-¡Uff! eso dolió. - Digo poniendo la mano en mi corazón, en broma.

Y finalmente una sonrisa se forma en sus labios. Justo lo que yo quería.

********

Ha pasado una hora, o más o menos eso pienso y ya estamos adentro de la sala de cine. Hemos escogido una película de terror, pues no se imaginarán lo terca que puede llegar a ser ésta chica. 

Ella ha votado por la película de terror y yo por una de acción, pero por más de darle vueltas al asunto, tuvimos que elegir la de terror porque según ella, yo era un cobarde. 

Noto como empieza a agarrar mi brazo, de forma nerviosa. Y eso que a penas estamos a mitad de película. 

-Leo... - Susurra jalándome del brazo. 

Volteo la mirada hacia ella y observo como se le fue el color de la cara.

-¿Qué pasa? - Le digo preocupado. - Karol no entiendo por qué elegiste esta película, si te ibas a poner así. 

-Yo..yo, solo... - Tartamudea. - Me arrepentí. Quiero irme ya. 

-¿Qué? ¿Por qué? - Le pregunto confundido. 

Los sonidos en la película se hacen más fuertes y ahora está temblando. 

-Leonardo, no puedo más. -Las lagrimas comienzan a salir de sus ojos. - ¡Sácame de aquí ahora, por favor!

Comienza a asustarme el hecho de que está llorando y temblando del miedo, entonces asiento y la tomo del brazo, pero en cuanto lo hago se desvanece por completo quedando así desmayada en mis brazos. 

-¿Karol? - Mi voz sale temblorosa. 

Observo sus ojos cerrados y las lágrimas que salían rápidamente de ellos hace pocos segundos. 

- Karol ¿Qué te pasa? - digo moviendo sus hombros. - ¡Joder, despierta, cariño...

 Mi corazón late apresurado y los ojos me arden. Tomo sus brazos y piernas y la acomodo en mi pecho y mis manos para poder cargarla. Voy lo más rápido que puedo, mientras que busco algún lugar para poder llevarla.  Pero en cuanto voy llegando al baño más cercano comienza a despertarse haciendo que deje salir un suspiro de alivio. 

La siento al lado del lavabo y sus ojos se van abriendo poco a poco. Su rostro está pálido, sus ojos rojos y le tiembla todo el cuerpo. No puedo creer como está, me duele mirarla de esa forma, se ve tan débil, tan insegura. 

-¿Estás bien? - Le pregunto nervioso. - Karol dime que estás bien, por favor.

Ella asiente y nos fundimos en un abrazo. Siento como se estremece y me toma con fuerza, como si así pudiera salvarse de lo que sea ue está dentro de ella. Y cómo quisiera saber qué es eso que tiene, cómo  quisiera protegerla y cuidarla de todo el mal que está pasando en este momento.  Pero por ahora solo estaré ahí para ella, para lo que necesite, porque no creo que quiera hablar ahorita de ello y menos con la situación en la que se encuentra.

Se separa un poco de mi para poder mirarme a los ojos y yo voy arreglando su cabello en un moño. Deslizo la mano sobre su mejilla y seco algunas lagrimas... cuando me doy cuenta que no sirve de mucho y sólo estoy regando su maquillaje, comienzo a lavar su rostro. 

Ella no quita sus ojos de mi rostro ni siquiera un segundo, mientras yo intento que todo vuelva a la normalidad. 

-Gracias. -  su voz es quebrada. 

-De eso nada. - digo con una pequeña sonrisa. 

 Intenta devolverme la misma sonrisa, pero viendo que no le sale, se inclina hasta mi rostro y me da un beso en la mejilla.  

-Puedo...Eh, ¿Puedo explicarte esto luego? - Me dice nerviosa. 

Asiento. - No tienes de que preocuparte, confío en ti. Puedes decírmelo cuando estés preparada. 

Noto como pasa saliva y le tiembla el labio ligeramente. 

Desde luego quisiera que me contara todo ahora, pero simplemente no puedo, sería un imbécil si lo hiciera. 


Finalmente Mía. (2do libro)Where stories live. Discover now