CAP 39 - Cinco años después (Modificado)

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Escuché la voz de César, gracias a Dios había llegado.

César- Ya llegué mi amor, ya va a nacer nuestra bebita- sonrió 

Sentía como algo en mi cuerpo se desgarraba poco a poco.

Dr- Cuando yo le diga que puje, usted puja- dijo feliz

Victoria- Me duele- grité

Dr- Después de unos dos o tres niños ya no lo siente mucho- dijo sonriendo

Vi como César sonreía

Victoria- Eso no va  a pasar- advertí

Dr- Bien Victoria, a la cuenta de tres pujas, uno, dos, tres, puja

Puje con todas mis fuerzas.

Dr- Bien Victoria, uno, dos, tres, puja

Volví a pujar

Dr- Ya veo la cabezita, una vez más Victoria, uno, dos, tres, puja fuerte

Puje con todas mis fuerzas y sentía que iba  a morir.

Escuché un llanto, mi bebita, mi preciosa bebita.

Dr- Felicidades, es una bebita preciosa- sonrió y me dio a mi pequeña

Victoria- Es igual a ti- sonreí

César- No, es igual a ti, mira esa narizita, esos ojitos, es igual a ti- sonrió

Victoria- No hemos elegido el nombre

César- Eligelo mi amor, elige tu el primero y yo el segundo- sonrió

Victoria- Bueno pues...siempre me ha gustado Ayelen

César- Me gusta- sonrió- ahora yo, su segundo nombre será Margarita

Victoria- César...muchas gracias

César- Margarita fue una gran mujer, es un privilegio para la nena- sonrió

Victoria- Te amo

César- Yo más- me besó tiernamente

A los minutos llegó una enfermera para llevarse a Ayelen a los cuneros, me sentía cansada, muy cansada, vi como César se acercaba a mi, tenía mucho sueño, cerré los ojos y caí en un profundo sueño.

Desperté y vi a César en un sofá, era de día, creo que ya es el día siguiente.

César se removió inquieto, despertó y me vió asustado.

Victoria- Que pasa- pregunté con dulzura

César- Soñe algo feo, te amo mi amor, mucho, mucho- me besó tiernamente

Victoria- También te amo- sonreí- mucho, mucho, mucho- sonreí nuevamente

César- No sabes cuanto me encantas, en serio quiero que salgas ya- sonrió picaro

Victoria- Ay- reí- tienes que esperar mucho- hice puchero

César- No lo creo- sonrió

Estábamos platicando cuando una enfermera entró con mi pequeña en brazos.

Enfermera- Hola, buenos días- sonrió- señora Victoria le traigo a la nena para que la alimente- sonrió

Victoria- Oh claro- dije asustada

La enfermera me pasó a la bebé y la coloqué en mi pecho para poder amamantarla.

Victoria- Ay- me quejé- duele- hice una mueca

César- Seguro es normal- sonrió

Enfermera- Si, es muy normal, luego te acostumbras- sonrió

Enseñame Del Amor (#PLC2017) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora