Thomas es un chico de 18 años que acaba de viajar a Nueva York para empezar sus estudios Universitarios, con amigos, un Tumblr famoso con 10,000 suscriptores en donde a diario hace preguntas para que chicos desconocidos le resuelvan problemas sobre...
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CAPITULO 6:
Dímelo en los oídos.
***
-Hey amiguito! ¿Qué haces aquí? -apagué mi celular viendo a Gabriel parado enfrente mía-Hace frio, no sé por qué no entras al club.
Me paré aparentando que la fría brisa no me afectaba en lo absoluto-no me gusta el club ya te lo dije-metí las manos en mis bolsillos-y que, ¿Cómo estás?
-bien-contestó- ¿y tú? -
-bien-
-Cool-sonrió mordiendo su labio-creo que tienes frio-dijo señalándome con su dedo, no sé por qué lo decía-ten toma mi suéter-se quitó su suéter quedando solo en una camisa amarilla que tenía un enorme dibujo de Mickey Mouse en el centro.
Negué-no es necesario-vi a un lado sin saber que decir-la verdad no hace tanto frio como tú dices.
-ten tómalo-apachó sus ojos-estas temblando-sonrió de medio lado-te ves algo gracioso así-me sonrojé levemente-ya tómalo, de todas maneras, yo pues vengo del club y casi no siento frio-
Agarré su suéter con desconfianza... olía mucho a perfume y no un perfume barato de esos que lastiman la nariz, sino que olía a de esos perfumes caros que miras en los catálogos y que al frotar la hoja sientes un olor oceánico mezclado con menta.
Y cabe destacar que si dice que me veo gracioso cuando tengo frio es porque empiezo a temblar en las piernas, es involuntario y la mayoría de veces no me doy cuenta, pero si muchos me han dicho que, si se ve "gracioso" por llamarlo de alguna manera, además mis dientes también me traicionar cuando empiezan a chocar entre si constantemente, debo mejorar eso.
- ¿siempre eres así de no se? -me encogí de hombros-amable.
-la mayoría de veces-dijo encogiendo un hombro-lo aprendí de mi padre, el solía regañarme mucho cuando no mostraba buenos modales-hizo un gesto pensativo-y ¿ya no sientes frio?...
negué-ya no-aunque su pregunta estaba de mas, me pareció un gesto muy lindo de su parte que fuera tan caballeroso-Gracias-
-de nada amiguito. Deberías considerar lo de entrar al club, hasta te puedo invitar una cerveza o un café o te llevo a mi camerino si no quieres estar en la fiesta-dijo hablando muy rápido como lo hace algunas veces- ¿te parece?
Sonreí-me parece-dije deduciendo que es de por si una idea bastante razonable y prometedora, "llevarme a su camerino", ¿Por qué dice esas cosas?... solo hace que me ilusione más con él, ¿Por qué tuve que obsesionarme de un chico tan malditamente perfecto?... dios no me quiere.
