"Cuidado con lo que deseas"

Capítulo 1: El deseo que nunca debí pedir.

Era una tarde aparentemente tranquila en la ciudad de Magnolia porque cerca de ahí, un gremio un tanto ruidoso hacía de las suyas. Si, hablo de Fairy Tail.

Un chico de cabello rosa estaba peleando con su compañero de hierro sobre asuntos absurdos, de nuevo. Pero se calmaron cuando una chica castaña abrió las puertas del gremio con fuerza. Todos la miraron, pues les sorprendía tal acción...

Cana: ADIVINEN QUÉ!? - Dijo la maga algo exaltada.

Natsu: Qué? Se te ha perdido tu tarro? - De pronto todos en el gremio comenzaron a reír.

Cana: Qué has dicho?

Natsu: N... na... nada, nada - Dijo el pelirosa nervioso y asustado, pues sin darse cuenta su compañera estaba junto a él con una mirada asesina.

Cana: Como sea, esta mañana pase por la ciudad y escuche a la gente decir que un mago que concede cualquier deseo acaba de llegar a Magnolia.

Todos: Qué? En serio? - Comenzaron a rumorear, pues les parecía increíble lo que la chica estaba diciendo.

Sin pensarlo una chica alvina se acercó a ella y la miro fijamente a la cara.

Cana: *Sonrojar* Qu... Qué pasa?

Mirajane: Estas sobria - Dijo con una sonrisa en el rostro.

Cana: A QUÉ VIENE ESE COMENTARIO!? En fin, sólo lo escuche, no es como que todo lo que se escucha fuese verídico.

Se volvieron a escuchar murmullos, incluso algunos comentarios de lo que pedirían si se llegaran a encontrar con ese mago.

En un rincón del gremio, una maga peliazul estaba sentada, limitándose a participar en la conversación de los demás, pues sus pensamientos sólo se concentraban en querer encontrar al mago que habían mencionado.

"Un mago que concede cualquier deseo" - Dijo Juvia para sí misma, imaginando una escena romántica donde Gray correspondía a sus sentimientos, tal y como ella lo había estado deseando por tanto tiempo.

Juvia: Juvia debe encontrar a ese mago lo antes posible. - Y justo cuando iba a preguntar acerca de ese personaje, se dio cuenta que por estar tan metida en sus pensamientos, todos ya habían retomado sus labores. - Ahhh!! Por estar distraída ya todos se fueron, como sea, Juvia saldrá a buscar a ese mago. Juvia no puedo esperar! Gray-sama allá voy!!!. - Después salió del gremio rumbo a la ciudad.

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Cerca de ahí un mago, usuario del hielo, estaba llegando de una misión. Se notaba que no le había ido muy bien, ya que su expresión era de enfado y frustración.

En el centro de la ciudad, Juvia preguntaba a cada persona que veía, alguna pista sobre el mago que estaba buscando (ya que ni siquiera sabía el nombre de dicha persona), pero a pesar de su esfuerzo no lograba nada. De repente su búsqueda se detuvo, pues a lo lejos vio una silueta que reconoció al instante de quién era.

Juvia: Gray-sama!!! - La chica corrió hacia él muy entusiasmada.

Gray: Ohh! Juvia, Qué haces por aquí?

Juvia: Juvia está buscando a un mago que concede cualquier deseo.

Gray: Cualquier deseo? Eso es imposible. No existe tal mago.

Juvia: Claro que sí, o al menos eso dijo Cana-san.

Gray: Todo lo que diga Cana es falso. Cómo puedes creer en las palabras de una persona ebria.

Juvia: Pero Cana-san estaba sobria.

Gray: Bueno, adiós, estoy muy cansado y quiero estar solo. - Dijo con esa frialdad que sólo él puede mostrar.

Juvia: Se encuentra bien Gray-sama?. Quiere que le ayude con algo? Necesita algo?

Gray: No, estoy bien, sólo estoy cansado por la misión.

Juvia: Seguro? Si quiere Juvia le puede conseguir una bebida energética para levantarle el ánimo.

Gray: No Juvia, estoy bien.

Juvia: Pero...

Gray: QUE ESTOY BIEN!!!

Juvia: Gray... sama...???

El chico no dijo nada y comenzó a alejarse.

Juvia: Gray-sama espere.

Gray: QUÉ NO ENTIENDES JUVIA, QUIERO ESTAR SOLO. DÉJAME EN PAZ.

Juvia: Lo siento Gray-sama, Juvia sólo...

Gray: DEJA DE MOLESTARME, ERES IRRITANTE, TE DIJE QUE QUIERO ESTAR SOLO, QUÉ ACASO NO ENTIENDES ESO? POR QUÉ SIEMPRE ANDAS TRAS DE MI, DESEARÍA QUE DEJARAS DE FASTIDIAR... es más, si existe ese mago dile que deseo que tú y yo nunca nos hubiésemos conocido.

Y sin más, el chico de hielo se fue de ahí.

Juvia por un momento quedó impactada después de haber escuchado aquellas palabras, pero en el fondo no se sentía mal, pues sabía cómo era su amado Gray. En parte sentía que él había reaccionado así por culpa de ella, así que tenía que darle su espacio, pues cuando tenía días malos, él era más frío de lo normal con ella.

Pero ambos no se habían dado cuenta de que el mago del que habían escuchado sólo rumores, estaba por ahí...

Mago: Él dijo "deseo". Muy bien, pues su deseo se hará realidad.

De repente ambos magos de Fairy Tail sintieron un leve mareo provocando que cayeran sobre el asfalto.