Mommy |jb| [ig] #BIEBERAWARDS2017

nueve [narrado]

Sydney Pov's

Terminé de maquillarme y me miré en el espejo: llevaba puesto un vestido blanco de tirantes y unos zapatos del mismo color, mi pelo estaba suelto y liso.

-¿A dónde vas?- preguntó Jack detrás de mí provocando que me asustase.

-He quedado con una amiga, hace mucho que no la veo y pues... eso.-dije intentando mostrarme tranquila e intentando convencerle.

-¿Qué amiga?- siguió.

-Una chica que viene desde España, se llama Leah.-me giré y sonreí.

-¿Leah? No me suena, cariño.- se pasó una mano por la barbilla.-De todas formas, ¿dónde vais a estar?

-Jack esto parece un interrogatorio.- le solté ya un poco cansada.- ¿No confías en mi?- internamente me di una patada pues era yo la que estaba mintiendo y engañandolo.

-Está bien, lo siento amor.-se disculpó.- llego tarde a casa de Joe, nos vemos.-dicho eso, me dio un pico y salió de la habitación.

Suspiré intentando relajarme y bajé para ir al salón.

-Siento que haya sido todo al última hora, Miley.-me disculpé con la niñera.

-No te preocupes Syd, ya sabes, este es mi trabajo.-dijo encogiendose de hombros mientras sonreía.

-Aún así me siento mal.-dije acercándome a mi hijo.

-Que no te preocupes, de verdad.-sonreí y me agaché para darle un beso.

-Adiós bebé, mami te ama.- le brindé una caricia y me dispuse a salir.

****

Llegué a mi destino y aparqué cerca del restaurante, guardé todo y salí.

Abrí la puerta y miré todo el local intentando localizar a esa cabellera color castaño, tirando a rubio. Al no encontrar nada, me di la vuelta pero antes de poder hacer nada, unas manos sujeraton las mías.

-Es increíble que hayas venido.-me sonrió, no pude quedar embobada.

-Bueno, ¿vamos ha cenar o no?-dije carraspeando un tanto nerviosa.

Justin negó con la cabeza con media sonrisa.-Está bien.

Me hizo una seña en donde había una mesa reservada y pasé ledante suya, eso provocó que me diera una nalgada.

-¡Oye!-me quejé.

-Mmmm, joder que culo mami.-mordió su labio y yo solo me sonrojé.

Una vez sentados nos pusimos a pedir, mientras traían las cosas nos pusimos ha hablar de diversas cosas y, me di cuenta, de que Justin podía ser un pervertido total pero sabía entablar conversación de cualquier cosa sin aburrirte y arreglar silencios incómodos.

Cuando ya estaba todo listo, seguimos igual solo que, ha diferencia de antes, ahora había subido la temperatura de los temas y él no paraba de brindarme caricias tanto cariñosas como tremendamente sensuales.

-Me lo he pasado muy bien nena.-me dijo.

-Me cuesta admitirlo pero...yo también.-suspiré.

No dijo nada más solo miró hacia un lado y antes de volver a decir algo, ya había estampado sus labios con los míos y he de admitir que he amado la sensación.