Llevaron a Derec a la clínica de Deaton - vaya - dijo Deaton.
- ¿Vaya? ¿es un vaya de he visto esto antes y se que hacer? Porque ese es el tipo de vaya que esperábamos - le dijo Stiles.
- Creo que sobre estimas mis habilidades - dijo Deaton.
- ¿Crees que sea permanente? - le pregunto Scott.
- Esto va mas haya de mi experiencia - dijo Deaton.
- ¿Que hacemos con el? - pregunto Simon.
- Hasta que se despierte es mejor dejarlo conmigo, aquí estará a salvo - les dijo Deaton.
Lydia se quedo en la veterinaria con Deaton y los demás se fueron a casa, a la mañana siguiente empezaron el instituto - no se lo que les pasa se llevan como el perro y el gato y no se porque - le dijo Stiles a Scott.
- Creo que esta muy claro - le dijo Scott - le gustas a Malia y Simon esta celoso.
- Ya pero no tendría porque estarlo, me cae bien Malia y quiero ayudarla pero ella no es Simon, vale estoy enamorado de el y Malia va a tener que aceptarlo, Simon debería confiar un poquito más en mi.
- Puede, ¿le dijiste que Malia intento besarte?
- No surgió el tema.
- Pues vas a tener que decírselo antes de que se entere por otra persona, si se entera de que no se lo contaste podría pensar que hiciste algo.
- Pero es que no hice nada, me aparte yo jamas engañaría a Simon.
- Pues deberías explicárselo antes de que se entere y piense cualquier cosa. Y te recuerdo que esta aprendiendo a usar sus poderes.
- Debería tener cuidado.
- Si.
En mitad de clase recibieron un mensaje de Lydia diciéndoles que Derec se había escapado, fueron a buscarle y Simon se quedo investigando con Deaton.
- Creo que ya se como podemos cambiarle - dijo Deaton.
- Genial, ¿como?
- Tu.
- ¿Yo?
- Tienes una magia diferente, una magia que no se a visto en siglos.
- ¿Estas diciendo que soy una especie de mago o algo así?
- No exactamente, tus poderes van mas haya de eso pero tu puedes salvar a Derec.
Scott, Malia y Kira se enfrentaron a Derec en el instituto y cuando ya estaban los tres en el suelo apareció Simon con un amuleto, dijo unas palabras en un idioma extraño y Derec volvió a la normalidad, la onda expansiva que había provocado el hechizo dejo a Simon en el suelo.
