La llama de nuestro Amor (2° temporada de alma de piratas)

CAPITULO 23 Noticias importantes.

---Louis---

Quiero recuperar a James.

Lo amo.

Realmente estoy enamorado.

Lo siento tanto.

Sé que no tengo perdón pero...

Quiero que vuelva a mí.

Decirle que lo amo

Que es mi todo.

Que perdone mi estúpida actitud.

Realmente fui un idiota.

No pensé con la cabeza fría.

Le dije lo peor.

Cancele nuestro compromiso en el día más feliz de su vida.

Realmente lo dañe.

Que imbécil soy.

James...

Mi amor.

Te necesito.

-Lo mejor es que te vayas. –comento.
-Su alteza yo...
-Sabes, ahora que vienes a aclarar todo eso, realmente eres un idiota.
-...
-Sí, James es hijo de Akihiko, ese maldito, -gruñó- abuso de mí, y James lo sabe.
-¿Qué?
-Sabe que su verdadero padre me violo, pero... es feliz porque Nowaki le demostró que podría ser fuerte, que era su figura paterna.
-Y-Yo no...
-Claro que no lo sabías, no es como si me sintiera orgulloso y le contara a todo mundo.
-Lo siento.
-Eres egoísta al pensar de esa forma.
-...
-Te importo más tu dolor, más tu perdida, pero nunca preguntaste acerca de cómo se sentía mi hijo, él paso por muchas cosas también.

Tiene razón.

No vi más allá.

Simplemente me cegué.

Maldición.

Lo hice sentir mal.

Celoso.

Intranquilo.

Triste.

Decepcionado.

Soy un bastardo sin corazón.

Mierda.

Lo siento.

Quiero protegerlo.

Que este conmigo.

Seguramente ahora me odie.

-LO siento, -hice una reverencia- sé que no merezco ni siquiera que me mire pero... lucharé por él porque lo amo, más que a nada.

Salí del palacio y me dirigí hasta el pueblo.

Todos me miran indignados.

-¿Qué haces aquí?
-Duque Richard.
-Más te vale que no hayas venido a buscar a mi prometido, ya que James dentro de unos meses será solo mío.
-No te lo voy a permitir, -gruñí- James no se casará contigo, porque me ama a mí y yo lo voy a recuperar.




---Kaoru---

Por un momento en mi día me desistía a la idea de ser rey.

Porque sabía que las labores eran demasiadas.

Y no tendría el tiempo suficiente para estar con mi amado.

Que los descuidaría junto con mis hijos.

Pero...

Ahora veo que me equivoque.

El reino marcha a la perfección.

Tengo tiempo para todo.

Y eso es lo que más me encanta.

Aunque quisiera estar todo el tiempo a lado de mi amado y mis lindos diablillos.

Sin olvidar a mi hermosa princesita.

Alexia...

Idéntica a mi amado.

Tan perfecta.

Mi familia es tan perfecta.

Digna de admirar.

Aunque mis hijos...

Digamos que tienen una mentalidad tan amplia.

Realmente son impresionantes.

Pero esto ocasiona que Ryu piense que le doy pésimos consejos.

Supongo que me lo merezco.

Siempre nuestros hijos entran a nuestra habitación cuando estamos indispuestos.

Al menos...

No nos han visto en plena entrega de amor.

Miro a mi amado con nuestra hija en brazos.

Nuestros hijos se fueron a jugar con sus amigos y primos.

Me quede revisando unos documentos ya que iba a realizar un tratado de paz con los reinos vecinos.

Tengo que revisar letra por letra.

Se ponen muy estrictos.

Así que deben estar a la perfección.

No sé cuántas horas he estado aquí.

Pero cuando menos me di cuenta ya era de noche.

Estaba muy oscuro.

Bostece y me estiré un poco.

Salí de mi oficina y me encontré a Ryu en el pasillo.

-Mi amor. –lo abrace aspirando su aroma.
-K-Kaoru, -susurro- no te vi en todo el día.
-Lo siento amor, tenía pendientes.
-No pasa nada.
-Hueles a lavanda y orquídeas.
-M-Me di un baño.
-Me encanta este aroma.
-B-Baka.
-Me hubiera encantado bañarme contigo y tallar tu suave cuerpo.
-P-Pervertido.

Lo tome de la cintura y lo bese.

-¿Quiénes cenar?
-Solo si estás en el menú.
-...
-Se me antoja mucho Ryu con crema batid...

Él coloco sus dos manos en mi boca para evitar que hablara.

Sus mejillas se sonrojaron.

Amo avergonzarlo.

Se ve tan dulce.

Tan perfecto.