El chico suicida 🔪

Sin sueños no hay futuro

~Aquí os dejo otro trozito de vuestra historia :3
 

  Desperté sintiendo una respiración frente a mi cara. Cuando empecé a abrir los ojos divisé una figura;era mi hermana.
-¿Que haces aquí?-Dije rascándome un ojo.
-¡Tú que crees!-Respondió exasperada-¡Pensé que te habías matado!
-Si tanto te preocupo...¿! Por qué narices no has venido antes!?-Espeté.-Han pasado más de cinco días
-Pensé que después de llamar a la poli no querrías verme,y tampoco era para venir,que cogieses un bisturí y me cortases la piel,o me lo clavases en un ojo...-Comentó sarcástica,entornando los ojos.
-La verdad,te tengo ganas,así que sí,has hecho bien en no venir, porque si no podría haber hecho algo de lo que seguramente me  hubiese arrepentido...-Espeté nuevamente.
El silencio se apoderó de la habitación. Nos mirábamos el uno al otro,con la mirada perdida,demostrándonos que ninguno de los dos iba a bajar la mirada.
El silencio fue interrumpido por la enfermera,Cat,que me hacía el seguimiento,y la única con la que más había hablado últimamente,por no decir la única.
-Buenos días,soy Cat,la enfermera que lleva el seguimiento de su...-Hermano-completó Emma,mi hermana,respondiendo con asco.
-Tú...¿eres su hermana?
   Hice un gesto afirmativo antes de que la grosera de mi hermana la respondiese con desgana.
Miré a Emma,que se encontaba mirando por la ventana.
-Bueno,ya casi es la hora de comer, así que en un rato vendrá Marcos,mi compañero,el encargado de repartir la comida, supongo que le conocerás.-me preguntó Cat,ignorando por completo la personificación de mi hermana en la sala.
-Supongo que creo que sé quién es, aunque nunca me había dicho nada sobre su nombre...
Cat me regaló una de sus medias sonrisas,tan bonitas que ni siquiera merecía una de ellas.
-Buenos,mi turno termina ya,así que vendré a verte por la tarde,antes de cenar.
-Vale,gracias.-respondí devolviéndole la sonrisa.
Mi hermana seguía aquí.
-Bueno,¿y tú qué querías?-Le pregunté a Emma,que estaba con la mirada completamente perdida a través de la ventana.           -Ese chico...-Susurró concentrada en su objetivo,un chico enfermo que se encontraba paseando con una bombona de oxigeno a través de el pasillo de cristal,situado frente a mi habitación.
-¿Qué pasa?
-Es guapísimo
-¿Solo te llama eso la atención de él,y aún así tienes esa cara de eclipsada,como si llevases años enamorada de él?
-Cállate.
-Eres una simple.
-Y tú un suicida satánico-Respondió,con cara de sentimiento superior,mientras me miró por dos segundos,para volver a centrar su atención en aquel chico.
¿Quién sería?-Me preguntaba yo mismo....