coleccionista de muñecas (Una Mente Psicopata))

Un final psicopata

Angeles guardaba con desgano sus pertenencias en la pequeña caja que le habian dado en el establecimiento. En ekka no cabia ni una lagrima, pero se conformo, de ahora en mas se conformaria con todo lo que le pasara porque sentia en su pecho, la angustia del fracaso.

Una sola cosa rondaba en su cabeza, el nombre de Charlie Headen dandole vueltas en todas las direcciones y aquel dia...

Flushbuck

_ ¡NO DIGAS MI NOMBRE!

Fin del flushbuck

Rememoro el frio de aquella habitacion.

La piel de su brazi se erizo...quiso llorar otra vez, una vez mas que completaban los desenta dias sin parar de hacerlo. ¿Por que dolia tanto?

_ Doctora...- miro sobre su hombro.

La muchacha desganada y con el pesar en sus hombros, estana parada sujetando su cuerpo con el marco de la puerta.

_ Luciana. - inquirio sin animos de preguntar cómo estaba porque eso, ella, ya lo sabia.

_ De verdad se tiene que ir ¿Eh?

_ Si...- volvio a enfocarse en guardar las cosas.

_ No fue su culpa.

_Claro que lo fue...

_ No. De hecho, no fue culpa de nadie; probablemente Charlie siempre lo supo.

_ ¿Por que dices eso?

_ Se despidio de mi, dijo que se iba a un lugar que pertenecia a todo y a la vez a nada o algo asi. Un juego de palabras. Pense que solo era su melodrama comun...ahora veo que no.

Angeles sostubo firmemente el grabador que usaba en las seciones. Le recordaba tanto a Headen.

Flushbuck

_ Ella quiere verte, tal vez, ahí esta la cura.

_ ¿Quiere verme? ¿Por que ahora?

_ Le pregunte lo mismo y me respondio "Y por que no".

Charlie sonrio.

_ ¿Que me dices Charlie?

_ No entiendo en que puede ayudarme.

Fin del flushbuck

_Yo tube la idea, me deje llevar por las emociones.

_ Pienselo bien, si Charlie siempre lo supo, fue porque el quiso que las cosas sucedieran asi. ¿Que mejor que morir en manos de quien mato? No tenia otra opcion para igualar la situacion. Pienso que no queria que lo odiara mas, entonces le hizo ese fabor.

Las lagrimas de Angeles caian sobre su mejilla, la enfermera quiso dejarse envolver en esa misma angustia pero su horario de trabajo no se lo permitio.

_ Gracias querida. -

Realmente no se sentia mejor, estaba lejos de ese estado dd satisfaccion, pero al menos, Charlie ya no se veia como un mosntruo, ya nadie podria desircelo.

Ambas se odiaban por llorar, pero...es que siempre fue asi con Headen. Su magnetismo siempre te convence, no habia de otra.

_ Ya debo irme, antes, sepa que cada uno hace lo mejor que puede.

La puerta se cerro detras de ella. Angeles cayo rendids en el sillon ¿Por que dolia tanto? Despues de todo, la bestia seguiria siendo bestia, eso nadie podia modificarlo.

Salio apresurada del lugar.

Si, Angeles no pisaria ningun otro establecimiento de ese tipo y muho menos tendria un consultorio propio.