Quiero ser feliz, pero de verdad.

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Me despierto temprano como todas las mañanas, lo primero que hago es asearme y me pongo ropa deportiva. Ahora que tengo más tiempo puedo dedicarlo más a mí y correr que falta me hace. Cuando estoy lista le hago una visita a Mia y por suerte sigue durmiendo como un angelito.

Bajo hacia al salón y no hay nadie. Es muy temprano, apenas son las seis de la mañana. Saco a H de su casita y me pongo los cascos. Le doy play al iPod y la primera canción que escucho es la de Adele Sind mi leve (to yogur new lover). Me meto en la canción, parece que habla de mí.

im giving you up

I've forgiven it all

you set me free

Esa parte de la canción dice lo que estoy pasando ahora mismo, le he perdonado. Me siento libre, por fin puedo empezar de cero. Cerrar esa etapa que tanto me ha hecho daño y comenzar una que merezca la pena. H como siempre sigue mi ritmo, me encanta sentir el aire en mi cara, la música, respirar. El jardín de Héctor es tan grande que me costaría dar dos vueltas seguidas. Miro de nuevo el reloj, son las 7. Tengo que despertar a Iker, voy a su cuarto y le levanto lento. Abre sus pequeños ojos y me mira.

-A levantarse que tenemos cole.

-Un poco más mami.

-No- le hago cosquillas - tenemos que desayunar.

-Uff.

Me hace caso, va al cuarto de baño para asearse y le miro para ayudarlo si necesita ayuda. Intento que hagan todos ellos mismo pero siempre estoy a su lado. Le ayudo a ponerse el uniforme y le peino.

-A desayunar.

Bajamos juntos y entramos a la cocina, no hay nadie. Le hago el desayuno mientras me preparo un café y me lo tomo.

-¿Mía no va a venir?

-No, le duele la pierna y no puede.

-A mí también mama

-Decir mentira no está bien - nos interrumpe Héctor- ¿has terminado?

-Si papá

-Pues coge tu mochila que te llevo al cole.

Sale corriendo para hacerle caso.

-Hoy no iré a trabajar- me anuncia.

-No hace falta- le contesto- me quedaré yo.

- No, prefiero quedarme

Iker vuelve y se marchan. Cojo la taza de café y me dirijo al cuarto de Mía, duerme tranquilamente. Cierro la puerta despacio y luego entro en el mío. Me siento en el balcón.

-Marta hoy no voy a trabajar- digo cuando coge el teléfono - me quedo con Mia .

-Me lo suponía, no te preocupes si hay algo importante te llamo.

-Gracias, hoy sal a las 2- le anuncio- durante las 3 semana cerraremos a esa hora.

-¿En serio?

-Sí, no tengo mucho tiempo con todo esto- le explico- nos limitaremos con los proyectos que tenemos hasta ahora.

-Por mi bien - está feliz- está tarde si no te importa voy a visitarte

-Claro

-Después nos vemos.

-Adiós.

Me meto en la ducha y me relajo, me quito el sudor de esta mañana. No tardo mucho porque quiero estar pendiente por si se levanta Mía. Al salir me seco bien y me pongo ropa deportiva. Me peino y me dejo el pelo suelto para que se seque.

SUEÑO PERDIDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora