¿Quién soy yo?

VIII

... La aeronave cayó, siendo víctima de la gravedad, sobre una densa y espesa superficie de hojas en la copas de los árboles, donde se encontraban los jóvenes, quienes estaban aturdidos y desorientados por el golpe. Al estar ya en el suelo, Josh estaba algo mareado y un fuerte dolor de cabeza se hizo presente cosa por la cual colocó su mano en ella para tratar de tranquilizar el dolor, al hacer contacto inmediatamente pudo sentir el líquido rojizo que caía lentamente del lado derecho de su cabeza, situación que en esos momentos y circunstancias era un poco peligroso, el joven rápidamente rasgó su camiseta y se la amarró habilidosamente alrededor de esta en un intento de venda improvisada para detener un poco la hemorragia.

—Mucho mejor— dijo el muchacho suspirando pesadamente.

<<Este no fue el mejor aterrizaje>> pensó

En ese momento su mente hizo "Clic" y buscó a los demás con la mirada para asegurarse de que sus amigos estuvieran a salvo, o que por lo menos no estuvieran gravemente heridos.

A unos cuantos metros de él se encontraba su amigo Shaze, que al parecer estaba inconsciente o solo algo adolorido por el impacto que sufrió el jet. Mientras él estaba ahí, Josh se aseguró de ir a revisar en los asientos de atrás para ver si estaba Shai, a quien encontró en unos de los asientos acostada.

—Hey Shai, ¿estás bien?— preguntó mientras se acercaba a como podía.

Ella al oírlo no pudo evitar sonreír, a lo que este le dedicó una dulce sonrisa

—¿Crees que puedas levantarte?—

—Lo intentaré—

El chico Shaiswer le ayudó a reincorporarse, durante el corto proceso pudo notar más de una señal de dolor en el rostro su amiga al tratar de levantarla.

—Creo que me lastimé la cintura— una mueca dolor no se hizo esperar.

—Tranquila, falta poco—

Cuando consiguió que se sentara, la chica le dio un fuerte y tierno abrazo, y él sin duda se lo devolvió con el mismo aprecio.

—Josh, ¿Qué sucedió?— preguntó desorientada.

—Al parecer algo provocó que cayéramos—

—¡Oh cielos!, ¿Y los demás? ¿Cómo están?—

—Shaze está inconsciente adelante, creo que no está gravemente herido—

—¿Y Jenn? O ¿Ray?—

—Voy a buscarlos, quedate aquí y descansa un poco, ya vuelvo— colocó una mano en el hombro de su amiga antes de irse.

Segundos después volvió a la zona delantera a buscar a los dos integrantes que faltaban, Jenn y Ray.

Al buscarlos en los asientos de adelante y en la cabina del piloto, no encontró nada excepto el cadáver del dicho piloto, el cual parecía violentamente masacrado y golpeado.

—Él no merecía esto— murmuro para si mismo antes de salir fuera de la aeronave.

Se tensó al notar que sus amigos no estaban en ninguna parte, razón para volver a adentrarse en el jet.

Al final, Josh se fue a reunir con los chicos donde estaban Shaze y Jenn,
esta ultima no parecía tener heridas de gran magnitud, pero si pudo notar varios raspones en sus brazos y un ligero corte en su mejilla izquierda.

Jenn que al aparecer se encontraba dentro del jet en los asientos delanteros junto a Shaze y Josh.

Ellos cuatro eran los únicos que estaban dentro de la destruida aeronave.

Al reunirse con ellos, primero se aseguró de que Shaze despertase para que le ayudara a planear y analizar la situación en la que estaban metidos. Mientras que Shai estaba en los asientos al lado de ellos descansando, esperando a que su amigo despertara.

Después de varios minutos tratando de que se despertara, al fin, Josh lo consiguió, luego de eso le contó y explicó ambos la situación y que podían hacer para salir de ella, o por lo menos cómo podrían enfrentarla.

Los cuatro se unieron para hacer un plan, se sentaron en un círculo para planear mejor y entender las ideas que tenía cada uno.

Así está la situación: estaban en la isla solos, ya que el piloto había muerto y no sabían donde estaba Ray. Además de estar solos, estaban desprotegidos contra cualquier peligro que llegara a acecharlos, también tenían que tener en cuenta que no era cualquier peligro sino que tenían que recordar que en esa isla habían mutaciones.

Un mismo pensamiento rondaba por la cabeza de todos en ese preciso momento.

Estaban perdidos, total y completamente perdidos.