Con las ganas

Recuperación *30*

Hace una semana que ya desperté. El Doctor me felicita por no tomar tan mal todo esto, al contrario, bromeo por mi falta de pierna y esas cosas, no es que no me importe que no tenga una pierna, solo pienso ¿Para que llorar?, si con llorar no se resuelve nada.

 Alicia viene todos los días, verla me hace sentir tan bien, a ella no le importa si me falta una pierna ademas sin una pierna sigo igual de guapo. Josh también viene muy seguido, me dice que si fuera por el estaría todo el tiempo conmigo, pero quiere que pase tiempo con Alicia.

Mi madre también viene a visitarme, estoy siendo mas flexible con ella, ya es tiempo de perdonarla ¿no?. Me alegré tanto al ver a mi padre, ya hacia un par de años que no lo veía. Mis padres me dieron una noticia no muy agradable, al parecer lo quieren volver a intentar, me da gusto, un poco, pero no quiero que mi madre lo vuelva a lastimar, pero si se quieren por que no intentarlo?

Esta tarde Josh traerá a Riley, también vendrá Calvin, y Alicia por supuesto. Ya quiero verla, la extraño, aunque solo hayan pasado horas de su partida, solo espero muy entusiasmado su llegada.

***

*Alicia*

Ya han pasado tres meses, y hace un mes le dieron el alta a Stephen. Este accidente logro cambiar algo en el, ahora se le ve mas feliz, y me alegra que no me haya alejado.

Ya estamos en vacaciones, las clases han terminado. Stephen esta un poco molesto, por que por el accidente sus notas bajaron, pero no reprobó.

Los padres de Stephen se ven muy felices, pero hay mentira en esa felicidad, yo soy la única que lo se. Hace unas semanas atrás vi a la madre de Stephen saliendo con una chico, nada menos que Calvin, ella le coqueteaba y el acariciaba sus piernas, un gran lió.

No quiero contárselo a Stephen, no quiero derrumbar su felicidad tampoco quiero ser una chivata, pero el tampoco merece que le mientan y menos yo. Hoy lo visitare en la tarde tal vez se lo cuente, depende de como este su humor.

Ya llegue a su casa, su madre me dijo que estaba en su habitación así que subí.

Escuche algo que sonaba como  una guitarra. La puerta estaba entrecerrada, así que solo entre cautelosa-mente, quería escucharlo. Estaba sentando en la silla de rueda frente a la ventana. Escuchaba que susurraba una canción mientras tocaba su Ukelele. 

''Te pedí qué te alejaras de mí, y qué no quería tener nada contigo, qué mucho he sufrido, y poco he vivido. Luego llegas tu, a hacer de mi vida una mágica luz,quien te dio el derecho de hacerme sentir qué soy para ti, qué eres para mi.''

-Me gusta como suena-dije sentada en la cama-

Da un pequeño salto de susto y se gira.

-Lo siento no me percate de tu presencia-dijo acercándose a mi en la silla de ruedas- Llevas mucho aquí?-pregunto mientras me daba un pequeño beso en los labios al cual correspondí alegremente.

-No mucho-respondí- ¿Quien la compuso?-pregunte mientras acariciaba su cuello-

El solo tardo un poco en contestarme, se veía un poco inseguro.

-Aun no esta terminada-dijo levantándose lentamente para sentarse junto a mi en la cama-

Ya en la cama se recostó su cabeza en mi piernas y comenze a jugar con su cabello.

-Me gusta como suena-conteste honestamente, dedicandole un pequeña sonrisa, la cual el devolvio- Soy tan afortunada de tenerte.

-Al contrario, yo lo soy-dijo mirándome fijamente-haz estado aqui para mi, no me haz dejado cuando mas te necesite... 

Agarre su mano y la bese, el cerro sus ojos dedicándome una hermosa sonrisa. Luego me acorde que tenia que contarle algo.

-Stephen....-susurre-

-Uh?-dijo abriendo los ojos-

No sabia poco contarle, todo esto lo pondría muy mal.

-Yo..yo quiero platicarte una cosa-dije mirando hacia la ventana-

El solo suspiro y se sentó en la cama mirando.

-Te escucho-dijo sin apartar su vista de mi.

-Es que...espero que no lo tomes tan mal, pero es mi deber contarte...-el asintió con la cabeza sin decir nada-hace unos días vi a tu madre...-interrupción-

-Con otro verdad?-pregunto bajando su cabeza-

Levante su cabeza con mis manos.

-No quiero que sufras...otra vez..-dije- Y si..

-Sabes quien era-dijo mirándome, veía como sus ojos se cristalizaban, en cualquier momento podría ver una lagrimar recorrer toda su mejilla, eso me hacia sentir culpable-

-Era, un chico, como nosotros-vi su cara de confusión-

-¿Como?-pregunto aturdido- Sabes que chico era?

-Si...era..era Calvin...-vi como en su rostro se formaba la ira- Stephen, lo siento.

Enseguida lo abrace. 

-Espero que no hagas una locura-continué diciendo-

-Es algo tan asqueroso Alcia, mi padre debe enterarse.