Enseñame a Amar

Grito de ayuda

Decidimos volver después de completar la vuelta ya estábamos más tranquilizados y podíamos pensar con claridad acerca del futuro, porque ya no había un "yo", ahora es un "nosotros" sin embargo me llamó la atención el hecho de que tus pasos fueran un poco más lentos hasta detenerte

–Kou, ¿ocurre algo? – te pregunto algo preocupado por tu actitud, estabas mirando al suelo, creo que nuevamente las dudas se han apoderado de tu mente, ¿dejarás que algún día logre rescatarte como hiciste conmigo?

–Ryo kun ¿por qué aceptaste tan rápido mi propuesta?, digo no soy más que un desconocido para ti– tu voz titubea al salir, estás temblando cómo si temieras por la respuesta ¿acaso crees que sería capaz de corresponderte por lástima? Claro que no lo haría, si dudas de algo, por favor dímelo, si hay alguna carga que oprima tu corazón dámela para poder sobrellevarla los dos, no logro soportar la incertidumbre que se crea en algunas ocasiones cuando hablamos, quisiera gritar todo esto. Desde que has formado parte de mi corazón hay muchas dudas que tengo sobre ti, me pregunto si algún día podré saber qué es lo que pasa por tu mente. Me preocupas, ya no quiero que dudes más de mí. ¿Qué es lo que debo de hacer para demostrarte que no te dañaré? Me duele el pensar que no puedes confiar en mí, y no sé por qué contigo todo se vuelve calmado, logras calmar la marea con una de tus sonrisas. Por qué siento como si mi pecho ardiera cada vez que dudas de mí, siento que ya no soy yo, me pregunto qué hubiera pasado si no te me hubieras acercado ese día, ¿seguiríamos cómo antes?¿no resulta acaso curioso, que pareciera como si de la noche a la mañana nos comportáramos como una pareja?. Pero no puedo, ya que también tengo dudas.

–Había algo que sabía que podía confiar en ti, sonará algo absurdo pero al ver tus ojos noté que eres alguien de corazón noble, y te dije que sí– era la verdad, había algo en esos ojos que me atrapaban e hipnotizaban, una esperanza a la cual podía aferrarme ciegamente. –Y no eres alguien desconocido, solamente no me recuerdas del todo– te digo mientras suelto una ligera risa que te deja algo confundido. Me pregunto si un día podrás recordarlo, aquella tarde donde me rescataste de mis demonios, escuchaste mis gritos y te quedaste a mi lado. Mucho antes de lo que crees recordar, ya me habías salvado.

"Muchas gracias por quedarte a mi lado" es lo quisiera decir, pero debido a mi timidez no puedo, mi boca no permite salir lo que el corazón siente, y antes de terminar avergonzado y no hacerlo me arrodillo en frente de ti tomando gentilmente tu suave mano para luego depositar un suave beso en ella, ambos ruborizados nos miramos durante unos minutos los cuales parece una eternidad, sonará algo absurdo pero en tus ojos podía ver claramente algunas de las más preciosas constelaciones.

"Sigamos juntos, por favor" es lo que trato de decirte cuando al levantarme beso tu frente

"Por favor, confía en mí" es lo que te digo cuando junto nuestras manos para ir tomados de ellas

Hay muchas cosas que quisiera agradecerte, pero al parecer no existen las suficientes palabras para decirlo, así que lo haré con tiernas acciones esperando que lo mensajes logren llegar hasta tu corazón.

POV Sakura

Me levanto un poco adolorida y me dirijo al espejo más cercano para ver mi estado, al llegar me quito lentamente las vendas. Las heridas las muñecas se van curando, pero las del cuello no todavía tengo el recuerdo latente de ellas en mi memoria

Me encontraba de nuevo en ese terrible lugar, era obscuro y húmedo, se podían escuchar a lo lejos las gotas de agua caer de las tuberías algo oxidadas, me encontraba con una soga en el cuello la cual estaba amarrada a un tubo de 2 metros de altura, él la jalaba desde el otro lado, algo similar a lo que se hace con las piñatas sólo que la había aflojado el agarre hace poco sólo para darme un respiro y volverá a anudar.