Me di cuenta de las cosas cuando ya habían terminado. Me di cuenta de que lo que parecía un juego, no era tan "de broma" y de que cuando haces una cosa, tiene sus consecuencias.
Necesito una máquina del tiempo. Vamos a volver a conocernos... 10 de septiembre, dos años atrás. Cambio de planes, ahora me voy a centrar desde el principio en los ojos marrones.
A veces las personas que más pasan desapercibidas, son las que más daño causan. Así, en silencio, poco a poco, y de manera muy profunda...
¿Cómo habría sido todo si hubiera dicho "no" a ciertas cosas en su día?
No sé a qué cojones está jugando mi destino, pero está dando demasiadas vueltas, y yo ya estoy confundida, yo ya no sé qué hacer, qué pensar, cómo actuar.
Desde hace dos días la frase que más se repite en mi cabeza es: Qué cojones he hecho mal...
Cada dos segundos lo primero que se me pasan por la cabeza son dos opciones: la primera es salir corriendo a buscarte, y abrazarte, y no soltarme, aunque me digas "quita pesada, que me agobias" (porque sabes que son las palabras mágicas), abrazarte tan fuerte que ahora mismo me recomponga entera. Tengo la cabeza, el corazón y el alma partidos en diez mil trozos cada uno, por tu culpa. Y aun así, eres el único que puede recomponer eso en dos segundos.
La segunda opción es de desaparecer y olvidarme de todo. No volverte a ver, no buscarte más para nada. Vamos a olvidarnos de todo. Vamos a olvidarnos de cada puto momento juntos, de cada sonrisa, de cada noche durmiéndonos a las 3:30 de la mañana a pesar de al día siguiente tener examen...de cada conversación, tanto por whats app, como por snap, como en persona. Vamos a olvidarnos de lo que hemos significado el uno para el otro, aunque sé de sobrada que para ti no he sido ni la mitad que tú para mi.
Vamos a olvidar el día en que nos conocimos, y la manera en la que lo hicimos, y como poco a poco hemos hecho de esto una relación que parecía muy dura.
O bueno, mejor olvídalo, olvídame tú, que yo no puedo.
He contado mil veces hasta diez, aunque al final tengo el puño destrozado antes del número tres.
Tranquilidad. Uno más es uno menos. "Estamos a un corazón roto de distancia de ser felices"
Lo siento por quererte, de verdad que no pretendía, yo ya no sentía nada por nadie, y nadie era capaz de conseguir lo contrario. Bueno, eso pensaba hasta ese "mejor que pases de mi" de hace unos días.
Me he destrozado otra vez tal y como han hecho en mi pasado, han vuelto a jugar conmigo como han querido y has hecho lo que has querido conmigo.
¿Y ahora lo que quieres es que vuelva después de haberme tirado por el suelo?
A pesar de todo te prometo una cosa (sé que soy pesada, pero en serio, será lo último que te prometa):
No voy a dejar que nadie te haga daño. NADIE, ¿me entiendes?
Que sepas esto, que siempre supe que no eras como el resto...
Yo me habría matao por esa sonrisa, ¿de verdad te crees que voy a dejar que otra te ofrezca menos?
Parece utópico, pero cada vez que sonríes a mi se me revuelve algo. Son incontables las fotos que me he guardado tuyas sonriendo, porque sinceramente con esa carita me has alegrado hasta los días más oscuros.
No dejes que te infravaloren, no dejes que te den menos del 100% de alguien, y sobre todo... no dejes que hagan contigo lo que tú has hecho conmigo.
"Que me pareces especial y diferente a lo que conocía..."
