Epílogo

406 66 34
                                    

Y otra vez llevo escribiendo estas cartas, Ahsel...

Mi doctor, mi madre, tu mamá, los psicólogos; dicen que no es bueno para mí recordar tu muerte.

¿Sabes cuando decaí? ¿Sabes cuando rompí la promesa que te hize? Cuando hallé el pequeño cofre con respuestas para mis 50 cartas.

Pero eso no fue lo que me destrozo, Ahsel... Sino fue la última carta que me dejaste que tú titulaste, epílogo.

En ese instante estaba tan confundida que llegué a dudar de que si tu la hallas escrito, pero no, esta era tu letra, como no reconocerla...

Epílogo.-

Anna... Mi pequeña y dulce, Anna. ¿Esto no es una réplica de Romeo y Julieta? Porque si de ser así dejaría de jugar el teatrito para volver a verte sonreír.

Te amo, Anna. Nunca me cansaré de decírtelo, lastima que solo lo leas en vez de que yo te lo diga.

Anna... No escribo esto porque quiero despedirme, princesa... No amor... Lo hago porque quiero que me prometas una cosa más. ¿Lo harías por mí? Pues lee con atención princesa.

Luego de que yo muera, tú lloraras por mí y cuando hallas llorado todo lo que tenías que llorar, me recordarás, amor... Lo harás y cuando creas estar completamente segura de que no será necesario llorar al recordarme, sonreirás a todos y a todas, saldrás, conocerás a alguien, y serás feliz... Después formarán una familia y tendrás un bebé al cual llamarás Ansel, ¡Si amor...! Como nosotros dos... :) Y que después de que hallas formado una familia, envejecerás y serás una abuelita alegre y feliz... ¿Me lo prometerás, Amor? Di que sí amor.... Imagina mi cara mientras hago un pucherito tierno... Entonces... ¿Lo harás? Yo se que sí...

De: Tu Bad Boy.

Para: Mi princesa Anna.

Para: Mi Eterno Bad BoyWhere stories live. Discover now